Los liberales alemanes del FDP forzarán la dimisión de su correligionario y ministro de Exteriores, Guido Westerwelle, lo más tarde el 18 de setiembre, con motivo de los comicios regionales de Berlín, informa hoy el rotativo Leipziger Volkszeitung.
El diario asegura que el presidente de los liberales y vicecanciller alemán, Philipp Rösler, y el secretario general del FDP, Christian Lindner, están de acuerdo en prescindir de Westerwelle, objeto de críticas desde hace semanas por su postura acerca de la intervención internacional en Libia.
Ambos desean esperar para decidir sobre el futuro de Westerwelle a los comicios regionales en Mecklemburgo-Antepomerania, este domingo, y Berlín, el 18 de setiembre, en los que los sondeos auguran resultados catastróficos para los liberales debido a la fuerte caída de su popularidad, atribuida a la pésima imagen del ministro de Exteriores.
El Leipziger Volkszeitung comenta que Rösler y Lindner están de acuerdo en que Westerwelle ceda entonces su puesto al actual secretario de Estado de Exteriores, el también liberal Werner Hoyer, un diplomático de carrera.
El futuro de Westerwelle, que antes del verano se vio obligado a dimitir como presidente de los liberales, será abordado hoy previsiblemente por el grupo parlamentario del FDP, que celebra una reunión de tres días para abordar el curso político de la formación en la segunda mitad de la actual legislatura.
El diario Rheinischen Post destaca hoy que el propio Westerwelle podría presentar ante sus correligionarios una moción de confianza para saber si cuenta todavía con su respaldo.
Ante el debate abierto en el seno del FDP, Steffen Seibert, portavozoficial de la canciller federal, Angela Merkel, aseguró ayer que trabaja estrechamente con su titular de Exteriores y rechazó cambios en su gabinete, aunque rechazó comentar la crisis interna del partido menor de la coalición gubernamental.
