El canal noruego TV2 difundió este 13 de marzo de 2012 nuevas grabaciones de llamadas telefónicas entre varias fuerzas policiales del pasado 22 de julio, cuando el ultraderechista Anders Behring Breivik mató a 69 personas en la isla de Utøya.
«El delincuente ha sido detenido. Varios disparos (…) Necesitamos evacuación con helicópteros. Rápido», dice a la central uno de los agentes destacados en la isla, escenario del campamento de las Juventudes del Partido Laborista, en una de las grabaciones.
En otra se puede escuchar a un agente dando avisos de alarma a las fuerzas especiales del grupo Delta:
«Están disparando en la parte sur de la isla, en la parte sur».
Hasta ahora sólo se conocía el contenido de las dos llamadas que Breivik hizo a la Policía para entregarse y las respuestas que recibió de los oficiales de guardia. Breivik, que permanece encarcelado en prisión preventiva desde hace casi 8 meses, será juzgado en un proceso que comienza el próximo 16 de abril.
El fundamentalista hizo explotar el 22 de julio un coche bomba en el complejo gubernamental de Oslo, donde murieron ocho personas, y justo después se trasladó a Utøya, a 45 kilómetros, donde disparó de forma indiscriminada y mató a otras 69.