Dimito por el bien del movimiento y de los militantes. La prioridad es el bien de la Liga y seguir con la batalla
El líder de la Liga Norte, Umberto Bossi, ha presentado su dimisión ante el consejo federal del partido, reunido hoy para nombrar a un nuevo tesorero, según revela el diario italiano La Repubblica.
La decisión del histórico político italiano echa un nuevo jarro de agua fría a la formación padana inmersa en una crisis debido a la investigación abierta por las fiscalías de Milán, Reggio Calabria y Napolés por un delito de fraude, blanqueo de dinero, financiación ilegal y colaboración con la mafia.
En el corazón de las pesquisas está precisamente el hasta ahora tesorero, Francesco Belsito.
Bossi, hasta ahora secretario general de la Liga Norte, fue ministro de Reformas para el Federalismo de Italia durante el pasado Gobierno dirigido por Silvio Berlusconi.
Durante ese periodo, la Liga fue el principal aliado del Pueblo de la Libertad (PdL), formación encabezada por el magnate italiano dueño de Mediaset.
Según la investigación abierta contra las cuentas de la Liga, Francesco Belsito utilizó los fondos para financiar operaciones ilícitas en el extranjero y viajes, coches y estudios a los hijos de Bossi, Renzo y Riccardo.
«Dimito por el bien del movimiento y de los militantes. La prioridad es el bien de la Liga y seguir con la batalla», ha dicho Bossi ante la cúpula de su partido, según explicó Matteo Salvini, concejal de Milán de la Liga Norte, a la emisora del partido, Radio Padania.
La Liga Norte baraja ahora, según los medios italianos, la posibilidad de quedar liderada por un triunvirato compuesto por el exministro de Simplificación Normativa Roberto Calderoli, así como el exministro de Interior Roberto Maroni, y la política del Véneto Manuela dal Lago.
La dimisión se produjo en un día en el que se filtró a los medios la existencia de una escucha telefónica, en la que se habla del supuesto dinero «negro» que Bossi dio hace tiempo a la formación y que los investigdores creen que puede tener varios orígenes, desde comisiones ilegales a corrupción.
En las interceptaciones se escucha también cómo la responsable adminisrativa de la Liga Norte, Nadia Dagrada, tranquiliza a Belsito sobre la forma en la que este puede «justificar el dinero» supuestamente recibido por Calderoli.
El pasado martes la Policía italiana registró la sede de la Liga Norte en Milán en el marco de la investigación contra Belsito, en la que por el momento no figura inscrito en el registro de los indagados ningún miembro de la familia Bossi.
El supuesto delito de apropiación indebida por el que se investiga al hasta ahora tesorero se refiere al dinero que pudo sustraer de la caja de la Liga Norte, mientras que el de estafa al Estado llega por los fondos que pudieron percibir de modo ilícito en concepto de financiación a los partidos.
Del sumario de la investigación emerge que Renzo Bossi y su novia Silvia Baldo se llevaron de las oficinas de la Liga Norte documentos que se cree que pueden pertenecer a las obras de reestructuración de la casa familiar que pudieron pagarse con dinero del partido.
Las investigaciones nacieron a partir de una serie de movimientos financieros en el extranjero, que desembocaron en inversiones sospechosas de fondos electorales de la Liga en Tanzania y Chipre, entre otras.