Al menos diez personas han muerto como consecuencia del terremoto de magnitud 5,8 en la escala de Richter que se ha producido en el norte de Italia este 29 de mayo de 2012, según un nuevo balance procedente de la cadena de televisión Sky TG24.
El terremoto se produjo a 40 kilómetros al norte de Bolonia y a 60 kilómetros al este de Parma y el hipocentro se ha localizado a 9,6 kilómetros de profundidad, según el Observatorio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El temblor se ha sentido en todo el país y las zonas más afectadas son Medolla, Mirandola y Finale Emilia, donde hay personas atrapadas entre los escombros de los edificios, según la Prefectura de la provincia de Módena, citada por la agencia de noticias AGI.
El nuevo seísmo ha provocado daños en edificios históricos que ya habían sufrido destrozos por el terremoto del pasado 20 de mayo de 2012, cuyo epicentro fue la zona de Ferrara, en el centro-norte de Italia, y que causó nueve muertos y la destrucción de edificios en las ciudades de Modena, Ferrara, Mantua y Bolonia.
