El comisario deja claro que la ayuda a España sólo tiene condiciones para la banca
El vicepresidente económico de la Comisión Europea (CE), Olli Rehn, ha dejado este 11 de junio de 2012 claro que las condiciones ligadas a la ayuda comunitaria a España se limitarán a los bancos y no afectarán a la política económica.
«La condicionalidad política se centrará en el sector financiero y bancario», ha subrayado Rehn en una comparecencia en Estrasburgo (Francia) ante la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo.
Según el comisario, la ayuda no supondrá «nuevas condiciones en política fiscal o reformas estructurales» para España.
Fuentes comunitarias explicaron este lunes que, pese a la ausencia de una «condicionalidad adicional», el Eurogrupo puede suspender el préstamo si el Gobierno no cumple con sus compromisos bajo el procedimiento por déficit excesivo, que incluyen las últimas recomendaciones de la Comisión Europea.
Esas recomendaciones incluyen la subida de impuestos indirectos como el IVA, el adelanto del retraso de la edad de jubilación o más pasos hacia la consolidación fiscal en las comunidades autónomas, entre otras.
No obstante, según Rehn, ese análisis de la economía española sigue siendo válido tras la ayuda europea al país y no requiere nuevas evaluaciones.
En el caso concreto de los bancos, el comisario ha considerado que será necesario entrar en una «mayor profundidad» para tener una imagen exacta de su situación, algo que se logrará con la evaluación independiente en curso y que llevará a cabo la propia CE.
Rehn ha recordado que el caso español es el primero en el que se utilizan las provisiones de los fondos de rescate europeos que permiten un «apoyo sectorial», en este caso dirigido a la banca.
El comisario confía en que el nuevo fondo permanente, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), entre en vigor «a lo largo de julio».
En el caso de la ayuda a España, ha asegurado que se «definirá pronto» mediante qué instrumento se efectúa el préstamo, si del MEDE, del fondo temporal (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera) o con una combinación de ambos.
Para Rehn, el apoyo a España debe ser «una señal muy clara» de que la Eurozona es capaz de afrontar sus «desafíos«.
«En este contexto, Europa está al lado de España y apoya a España para reestructurar su sector bancario».
El comisario ha asegurado que la decisión del Eurogrupo de ofrecer a España una línea de crédito de hasta 100.000 millones de euros debe frenar el «contagio» al resto de Europa y mejorar el acceso al crédito en el país.
Rehn ha vuelto a defender además la posibilidad de que en el futuro pueda usarse el fondo permanente de rescate para recapitalizar directamente bancos en apuros, a diferencia de lo hecho con España, donde la ayuda la canaliza el Estado.
Esa vía «ayudaría a romper el vínculo entre la deuda soberana y los bancos», ha explicado el comisario, quien ha opinado sin embargo que la opción sólo podrá discutirse una vez esté ratificado el tratado del MEDE, que en su redacción actual no lo permite.