El ministro principal de Gibraltar, Fabián Picardo, ha asegurado estos días que no piensa retirar los bloques de hormigón que lanzó al mar a finales de julio y que destruyeron el caladero donde los pescadores españoles faenaban desde hacía décadas.
Sin embargo, no ha comentado nada de los bloques en las urbanizaciones de lujo españolas en las que posee varias viviendas. Y es que Picardo tiene casas en Sotogrande y Benahavís, dos de los paraísos más demandados por la gente de bien en España.
De hormigón, pero de lujo, son el piso y el chalet que Picardo posee en tierras españolas. Uno de ellos, en Benahavís, cerca de Marbella, tasado en más de 322.000 euros. Una exclusiva urbanización con vigilancia privada y acceso cerrado a los no residentes.
Allí tiene el ministro gibraltareño una vivienda, -de las 134 que se construyeron y vendieron a lo largo de 2009-, con 130 metros cuadrados más nueve de terraza, según detalla la revista ‘Interviú‘ en su edición de esta semana.
Con dos plazas de garaje y trastero, el piso está en una urbanización que se halla junto a dos campos de golf y cerca de Marbella, la cuna del lujo al sur de España. Aunque parece, eso sí, que Picardo pisa poco por sus paraísos españoles.
Sobre todo, quizá, a raíz de estallar el conflicto diplomático entre España y Reino Unido, que él mismo se ha encargado de caldear con sus declaraciones.
Tampoco parece acudir a su chalet en Sotogrande, donde veranean algunas de las familias españolas más ilustres como los Marichalar, los Botín, los Domecq o Luis Alfonso de Borbón, además de rostros más conocidos como el de Ana Rosa Quintana o Patricia Rato.
Fue en 2006 cuando Fabián Picardo compró con su entonces mujer, Elaine Lima, un chalet de 253 metros cuadrados, con tres dormitorios, tres baños, patio de servicio, salón, terraza, trasetero y porche cubierto, además de cocina.
Todo ello en una parcela de casi 1.600 metros cuadrados en la que no faltan los árboles, zonas de recreo y ajardinadas y una piscina con la que mitigar el calor del sur, ahora que Gibraltar está comiendo terreno al mar.
Picardo no parece acudir tampoco demasiado por este chalet de Sotogrande, ya que actualmente lo tiene alquilado para varios meses.