Tenía 38 años cuando salió de una reunión en King’s Lynn (Norfolk) y tomó la carretera A47. Llevaba una cámara en el casco, que registró la totalidad de su corto viaje esa tarde de junio de 2013.
David Holmes había ido a reunirse con algunos amigos y compañeros de trabajo. Tras ello salió a toda velocidad.
Circuló algunos metros y se cruzó al contracarril para sobrepasar con notable rapidez a otra moto y a dos autos que no iban lo suficientemente rápido.
Más adelante, sobrepasó a un automovilista. Iba a una velocidad tan grande que no llegó a ver el enorme letrero escrito con pintura blanca en la calzada, que decía «SLOW» (Disminuya la velocidad).
En ese momento, superaba los 160 kilómetros por hora.
La señal no estaba azarosamente allí. Alertaba sobre un cruce que permitía a los conductores de la mano contraria cruzar para doblar a la derecha.
El conductor del Renault negro jamás se percató de que un motociclista se aproximaba a toda velocidad, así que dobló como si el camino estuviera despejado.
Cuando Holmes se dio cuenta de lo que había ocurrido, la colisión era ya inevitable.
Su madre ha hecho público el vídeo para advertir de los peligros en la carretera.