Se la ha descrito como una mujer "enorme", con cola de caballo
No se tenía constancia hasta ahora de un robo tan insólito y, por qué no decirlo, tan ‘original’ y algo repugnante.
Ha sucedido en la ciudad alemana de Darmstadta, donde una cuarentona de generoso busto, -bautizada por los agentes como ‘la pulverizadora de leche’-, ha atracado una farmacia ‘disparando’ literalmente el líquido materno en el rostro de los empleados.
Según parece, la fémina entró este lunes 3 de noviembre de 2014 por la tarde en el establecimiento, y pidió haciéndose la simpática un ‘sacaleches’, mostrando un billete de 200 euros.
Justo cuando uno de los empleados iba a cobrarse, se sacó los senos y, apretándolos con los dedos, lanzó un poderoso chorro a su rostro, del que no se libró tampoco otra trabajadora del lugar que quedó también ‘cegada’.
COMO ESTATUAS DE SAL
Los atacados narraron que se quedaron «como estatuas de sal» ante tamaña agresión, y poco pudieron hacer para evitar que la ladrona se hiciera con un billete de 100 euros de la caja registradora.
La Policía ha puesto en busca y captura a la protagonista de suceso, y que en su huida perdió el ‘sacaleches’ que se había llevado en mitad de la confusión junto a su dinero.
Tal y como se hace eco ‘Daily Mail‘, se la ha descrito como una mujer «enorme», con cola de caballo y que tenía acento extranjero.
