Cazatesoros polacos y alemanes han comenzado a excavar en el sitio del suroeste de Polonia donde se cree que permanece oculto un tren blindado nazi perdido en 1945 con una carga de hasta 300 toneladas de oro, joyas y antiguas reliquias requisadas por los soldados de Adolf Hitler.
Piotr Koper y Andreas Richter aseguraron a principios de agosto del año pasado que habían localizado el tren enterrado a más de 100 metros de profundidad bajo las montañas de la ciudad de Walbrzych, gracias a un mapa dibujado en su lecho de muerte por uno de los soldados alemanes que participaron en la ocultación del convoy ferroviario.
Según la leyenda local, ante el avance del Ejército Rojo en 1945, los nazis decidieron trasladar el tesoro a un lugar seguro del Tercer Reich, pero el tren blindado desapareció bajo las montañas, cerca del castillo de Ksiaz, en un gigantesco complejo de túneles que Hitler habría ordenado construir con fines desconocidos.
Durante décadas han circulado rumores en la región sobre este tren nazi blindado y cargado de armas, pero también posiblemente de joyas, oro, obras de arte y documentos de archivo, que habría desaparecido en la ruta ferroviaria entre Breslavia y Walbryzch.