La fábrica rusa de noticias falsas tiene un nombre y una dirección: se llama Internet Research Agency (IRA). Estaba ubicada en un moderno edificio de San Petersburgo, en el número 55 de la calle Savushkina.
También se conoce su principal tarea: dividir a los estadounidenses y sembrar desconfianza en la democracia.
La fábrica, sospechada de querer debilitar a la candidata demócrata Hillary Clinton, una fuerte crítica de Vladimir Putin, y favorecer la candidatura de Donald Trump, volvió al centro del debate después de que el fiscal especial Robert Mueller imputara a 13 rusos y a 3 empresas por la injerencia en las elecciones presidenciales de 2016.
El hombre detrás de la IRA es Yevgeny Prigozhin, un empresario del rubro gastronómico. Conocido en la prensa como el «Cocinero de Putin», el opositor Alexey Navalny lo llama con un nombre tal vez más apropiado: «el troll de Putin».
Gracias a su amistad con el mandatario ruso -cliente habitual de sus restaurantes- Prigozhin creó una empresa, Concord Catering, que comenzó a proveer de alimentos a las escuelas y al ejército ruso. Así Prigozhin, un ex convicto que comenzó su carrera vendiendo hot dogs en la calle, se convirtió en un oligarca capaz de amasar una fortuna de más de 1000 millones de euros.
Fuente: Infobae/Leer más