La victoria de Boris Johnson, exministro de Exteriores y exalcalde de Londres, en las primarias del partido conservador británico ha desembocado en un terremoto político. Cuatro miembros del Gobierno han presentado su dimisión en las últimas horas y un quinto podría hacerlo pronto, según recogen agencias y comparte Manuel Trujillo para Periodista Digital.
El líder tory, que desde este miércoles será también primer ministro del país, se ha impuesto al actual ministro de Exteriores, Jeremy Hunt, en la carrera por suceder a Theresa May con una diferencia de 45.000 votos. En un breve discurso nada más hacerse con el mando, aseguró que «unirá» al Reino Unido, al que le «dará energía» y un espíritu «de que podemos hacer» las cosas. Polémico y partidario de un brexit ‘en todo caso’, su figura no deja indiferente.
El último de sus colegas en renunciar a permanecer a su lado en esta nueva etapa ha sido el ministro de Desarrollo Internacional, Rory Stewart; poco antes lo hacía el ministro de Justicia, David Gauke. También se van la secretaria de Estado de Educación, Anne Milton, y el secretario de Estado para Europa y las Américas, Alan Duncan. Se espera lo mismo del ministro de Economía, Philip Hammond, que ya anunció sus intenciones.
De igual manera, ha expresado sus dudas sobre Johnson la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon. Le ha felicitado por su nuevo cargo, pero ha matizado que resultaría «hipócrita» no reconocer la inquietud que le genera la «perspectiva» de su mandato. Ha destacado expresamente su «historial». En cuanto a Jeremy Corbyn, el líder de los laboristas, le ha recriminado el haber recibido el respaldo de unos pocos afiliados conservadores «no representativos» del país.
Desde el corazón institucional de la UE, asimismo, las reticencias son claras. «Le llevó mucho tiempo decidir si estaba a favor o en contra del brexit», ha dicho el vicepresidente primero de la Comisión Europea, Frans Timmermans. Por su parte, el negociador de los Veintisiete, Michel Barnier, le ha recordado que lo que quiere Bruselas, preferiblemente, es una salida «ordenada» del Reino Unido.
Johnson ha dejado claro que cumplirá con la fecha del 31 de octubre y ha tildado el proceso de «todo o nada», lo que ha hecho temer sobre la posibilidad de que el país se vaya sin pacto alguno. De hecho, la agencia Moody’s ha elevado la probabilidad para esta opción y advierte de sus «significativos efectos negativos».
Diversas felicitaciones
A pesar de todo esto, Johnson ha recibido las felicitaciones de varios mandatarios internacionales. «Felicitaciones a Boris Johnson por convertirse en el nuevo primer ministro de Reino Unido. ¡Él será grande!», ha dicho el presidente de EE UU, Donald Trump. El presidente francés, Emmanuel Macron, y la futura presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ya quieren trabajar con él.
Por su parte, el primer ministro de Irlanda, Leo Varadkar, ha manifestado su deseo de fortalecer las relaciones británico-irlandesas. «Buen trabajo», le ha dicho el viceprimer ministro italiano Matteo Salvini. Por último, ls socios principales del Gobierno británico, los norirlandeses del Partido Democrático Unionista (DUP), le han dado su bendición; y Theresa May le ha prometido su «total» apoyo.
Los siguientes pasos
El cambio de primer ministro se producirá este miércoles, cuando May acudirá al palacio de Buckingham para presentar formalmente su dimisión a la reina Isabel II y comunicarle que hay un nuevo líder.
Después, el nuevo «premier» irá al palacio para celebrar la audiencia de rigor con la jefa de Estado, antes de trasladarse a la residencia de Downing Street para empezar a nombrar a sus ministros. La formación del nuevo equipo de Johnson será seguida con atención por el sector empresarial.
El director general de las Cámaras de Comercio Británicas (BCC, en inglés), Adam Marshall, pidió este martes a Johnson que evite un brexit confuso y desordenado». «El mensaje a Boris Johnson no podría ser más simple: el momento de hacer campaña ha terminado y necesitamos que se ponga a trabajar», dijo.