La foto del líder de la Cámara de los Comunes, el conservador Jacob Rees-Mogg, en la que trata de tomarse una siesta durante un debate del Brexit fue proyectada en el castillo de Edimburgo este jueves por un grupo de activistas que se oponen a la salida del Reino Unido de la Unión Europea, según recoge RT y comparte Paula Dumas para Periodista Digital.
Junto a la imagen proyectaron un video acompañado del texto: «Están mintiendo, quieren un Brexit sin acuerdo».
El diputado conservador ha sido fuertemente criticado por recostarse cómodamente en el sillón durante la sesión que se llevó a cabo el martes en la Cámara Baja británica. A pesar de que varios diputados le gritaron que se sentara bien, él se limitó a sonreír, ajustarse las gafas y permanecer en reposo, informan medios locales.
La actitud del diputado conservador fue blanco de sátiras por parte de otros colegas de escaño. La diputada laborista Anna Turley consideró en un tuit que la postura desparramada del diputado ‘tory’ era «la encarnación física de la arrogancia, el privilegio, la falta de respeto y el desprecio por nuestro Parlamento».
«Su lenguaje corporal durante toda la noche ha despreciado tanto a esta Cámara como al pueblo» expresó, por su parte, la diputada del Partido Verde Caroline Lucas durante la sesión. Rees-Mogg «se ha extendido unos tres asientos como si fuera algo muy aburrido para él lo que escucha esta noche», agregó la legisladora.
«Yo espero que su niñera entre a la Cámara con una manta, una almohada y una taza caliente de Horlicks para el pobre hombre», escribió la diputada laborista Angela Rayner. Mientras tanto, las redes no tardaron en generar memes al respecto.
El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, volvió a insistir este jueves en que su nación deberá abandonar la Unión Europea el próximo 31 de octubre.
«La disciplina siempre es dura, pero aquí estamos entre un grupo de hombres y mujeres que saben que en algún momento tienen que administrar disciplina y ser fuertes con su mensaje», agregó el líder británico ante los periodistas.
Su anuncio se da poco después de que el Gobierno británico solicitara al Parlamento una nueva votación el próximo lunes para celebrar elecciones generales anticipadas el próximo 15 de octubre. Con 298 votos a favor y 56 en contra, la moción de Johnson fue derrotada, pues necesitaba ganar con una mayoría de dos tercios para seguir adelante con su propuesta.
