La princesa Haya de Jordania (45) y el emir de Dubái Mohamed bin Rashid al Maktum (70) entraron en una batalla judicial encarnizada por sus pequeños Dalila y Zayed, de 12 y 8 años, respectivamente.
Los tribunales finalmente emitieron su fallo, la sentencia fue publicada por la BBC y en ella se puede ver que el jeque arremetió contra su esposa con amenazas y una campaña intimidatoria, por lo cual el juez decidió otorgarle la patria potestad de las menores.
También se ha conocido que el jeque intentó evitar la publicación de la sentencia, que fue dictada la semana pasada, pero que apenas se dio a conocer el 05 de marzo de 2020.
Según lo relatado en la sentencia, la princesa fue amenazada con ser llevada a la cárcel por hombres que llegaron al jardín de su vivienda en helicóptero, y por si fuera poco, la mujer encontró en un par de oportunidades un arma de fuego debajo la almohada de su cama.
Pero el jeque no se quedaría con indirectas, y también le aseguró que ni los niños ni ella estarían nunca seguros en territorio británico.
“El padre, por lo tanto, actuó de una manera que tenía como objetivo intimidar y asustar a la madre, y alentó a otros a hacerlo en su nombre”, señala el juez.
Fue el mes de julio de 2019 cuando la princesa Haya de Jordania llegó a Londres para refugiarse con los pequeños Dalila y Zayed, después de salir despavoridos de Dubai, además la princesa huyó con una maleta con millones de euros, una señal clara de que no pretendía regresar y estar de nuevo a merced de su exesposo.
La también hermana del Rey Abdalá II de Jordania era la más joven de las seis esposas del poderoso jeque y la batalla legal desató una crisis diplomática entre Londres y los Emiratos Árabes. La sentencia supone además un nuevo triunfo para la baronesa Fiona Shackleton, quien es una prestigiosa abogada del Reino Unido.
El jeque Mohammed rechazó los juicios y las conclusiones, y apeló sin éxito a mantenerlos fuera del dominio público.
Dijo que la apelación fue «hecha para proteger el interés superior y el bienestar de los niños» y que el «resultado no protege a mis hijos de la atención de los medios de la misma manera que otros niños en procedimientos familiares en el Reino Unido están protegidos».
