A Rusia no le ha sentado bien el anuncio de Finlandia que tuvo lugar el 12 de mayo de 2022 en el que mostraba su interés en ingresar en la OTAN. Al hacer esto, se rompería con un total de 80 años de neutralidad.
El presidente finlandés Sauli Niinistö y la primera ministra Sanna Marin han lanzado dicho comunicado de manera conjunta en el que expresaban su inclinación a entrar en el Organismo.
«Finlandia debe solicitar su ingreso en la OTAN sin demora. Esperamos que los pasos a nivel nacional aún necesarios para tomar esta decisión se tomen rápidamente en los próximos días».
Según las intervenciones realizadas por Niinistö y Marin, al unirse a la Alianza Atlántica en la OTAN se «fortalecería la seguridad de Finlandia» y además, la alianza militar se haría más fuerte.
History being made by our northern neighbours. Today's announcement by @MarinSanna & @niinisto paves the way for #Finland joining #NATO.
You can count on our full support. We support a rapid accession process. From our side will make necessary steps quickly.
#StrongerTogether pic.twitter.com/qdat42g3Y3— Kaja Kallas (@kajakallas) May 12, 2022
Esta idea tan urgente por parte de Finlandia viene detonada por la invasión de Ucrania por parte de Rusia. El interés de los ciudadanos en ingresar en la OTAN ha aumentado debido a la guerra. Esto lo demuestran los sondeos realizados a la población: antes de la guerra, el porcentaje de interés de los finlandeses por pertenecer a la OTAN era del 12%. Sin embargo, con la invasión rusa, esa cifra ha aumentado de manera considerable hasta llegar al 68%, según informa 20 Minutos.
«Hemos necesitado tiempo para que el Parlamento y toda la sociedad establezcan sus posiciones al respecto. También para establecer estrechos contactos internacionales con la OTAN y sus países miembros, así como con Suecia. Hemos querido darle a la discusión el espacio que requería».
Algunos países, como pueden ser Dinamarca o Estonia, han mostrado su apoyo a Finlandia ante el anuncio. En el caso de que tuviera lugar el ingreso, éste podría realizarse antes de final del presente año o a principios de 2023.
Como se ha mencionado anteriormente, a Rusia le ha molestado la idea de Finlandia en la OTAN. El país nórdico comparte frontera con Rusia y al convertirse en un miembro de la organización podría interpretarse por Rusia como una amenaza al reforzar la posición de la OTAN en el norte europeo.
Recordemos que según el artículo 5 de la alianza, si un miembro de la OTAN representa un ataque para otro estado miembro, lo representaría también a todas las naciones.
«Las partes acuerdan que un ataque armado contra una o más de ellas, que tenga lugar en Europa o en América del Norte, será considerado como un ataque dirigido contra todas ellas (…)».
En el caso de que se diera luz verde al ingreso de Finlandia a la OTAN, el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dimitri Medvedev, ha asegurado que realizaría un despliegue nuclear en el Báltico.
«Habrá que reforzar a la agrupación de fuerzas de tierra, la defensa antiaérea, desplegar importantes fuerzas navales en las aguas del golfo de Finlandia. Y en ese caso ya no se podrá hablar de un Báltico sin armas nucleares. El equilibrio debe ser restablecido».
