El enviado de EEUU para Oriente Medio, George Mitchell, tiene previsto entrevistarse hoy con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, en esta ciudad cisjordana.
Mitchell llegó en la tarde de ayer a la zona con el objeto de impulsar las negociaciones de paz indirectas entre israelíes y palestinos en las que ejerce como mediador.
Esta visita es la primera desde que arrancara el pasado 9 de mayo este nuevo proceso de diálogo impulsado por la Casa Blanca, que tiene un plazo fijado de cuatro meses de duración, tras el cual se prevé que las partes reanuden las conversaciones directas.
Tras su llegada ayer, el enviado se reunió en Tel Aviv con el ministro israelí de Defensa y ex primer ministro laborista, Ehud Barak, en la residencia de éste.
Medios locales se limitaron a constatar el encuentro y consignar que en él se abordaron las «negociaciones de proximidad», como se conoce en el argot diplomático a los contactos indirectos con intermediarios.
Según adelantaron a Efe fuentes de la sede de la gobernación en Ramala, la «Mukata», en la reunión de Mitchell con distintos responsables palestinos se abordarán «cuestiones relativas a la seguridad y fronteras».
Además de Abás, el emisario del presidente Barack Obama tiene previsto verse con el jefe negociador de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat, y otros responsables en Ramala.
El periódico árabe «al-Quds al-Arabi», editado en Londres, asegura hoy que el presidente palestino presentará a Mitchell la posibilidad de que fuerzas de la OTAN supervisen las fronteras del futuro Estado de Palestina.
Las fuentes de la Presidencia de la ANP en Ramala consultadas por Efe no descartaron esa posibilidad y explicaron que el asunto se «enmarca en la agenda del día: fronteras y seguridad».
El enviado de la Casa Blanca se entrevistará mañana en Jerusalén con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, después de que concluya la festividad judía de Shavuot (Pentecostés) con la que se celebra que Moisés recibió los Diez Mandamientos en el Monte Sinaí.
Las conversaciones mantenidas entre las partes bajo mediación estadounidense se están caracterizando en esta ocasión por la discreción. A diferencia de anteriores visitas a la zona, en últimas ocasiones apenas ha trascendido comentario alguno acerca de la agenda o el contenido de las reuniones.
El recientemente iniciado diálogo indirecto pone fin a dieciséis meses de parón en el proceso de paz, resultado de la ofensiva militar israelí en la franja de Gaza entre diciembre de 2008 y enero de 2009, que enterró las negociaciones lanzadas en Annapolis (EEUU) a finales de 2007.
La ANP exigía la completa paralización de la construcción en Cisjordania y Jerusalén Este para retomar el diálogo, condición que Israel rechaza de forma oficial.
Sin embargo, los palestinos habría aceptado emprender el diálogo bajo mediación tras recibir garantías de Washington de que los proyectos de edificación en el territorio ocupado en 1967 por Israel quedarían paralizados.
