TEHERAN, 25 (Reuters/EP)
Las autoridades judiciales de Irán han ordenado la puesta en libertad del cineasta Jafar Panahi, que llevaba en huelga de hambre más de una semana y que fue detenido el pasado mes de marzo tras expresar públicamente su apoyo al movimiento opositor liderado por Mir Hosein Musavi, informó este lunes la agencia ISNA citando a un fiscal de Teherán.
Panahi, que ha ganado varios premios internacionales como el León de Oro del Festival de Venecia (2000) o la Cámara de Oro del Festival de Cannes (1995), es considerado como uno de los directores más influyentes de Irán. Una de sus películas más conocidas es ‘El círculo Dayereh’ (2000), en la que critica la forma en que son tratadas las mujeres en la República Islámica, mostrando las vejaciones cotidianas a las que son sometidas y su falta de libertad
El pasado fin de semana, y durante su discurso como ganadora del premio a la mejor actriz en el Festival de Cannes, Juliette Binoche criticó a las autoridades iraníes por el encarcelamiento de Panahi, diciendo que «su único delito es el de ser un artista, el de ser independiente».
Un fiscal de Teherán, Abbas Jafari Dolatabadi, indicó a ISNA que las autoridades iraníes habían mantenido una reunión con el cineasta el pasado jueves y habían decidido «considerar su solicitud de ser liberado antes de la audiencia judicial». «Hemos decidido que sea puesto en libertad bajo fianza», señaló. Sin embargo, el fiscal no indicó con exactitud cuándo se realizaría la excarcelación de Panahi.
El director de cine iraní dijo la semana pasada que no pondría fin a su huelga de hambre hasta que le autorizaran el acceso a su abogado, se permitiera la visita de sus familiares y se levantara la prisión preventiva declarada en su contra. Fuentes de su familia indicaron que tanto ellos como sus abogados habían podido visitarle la semana pasada.
Diversas ‘web’ opositoras informaron el pasado jueves de que el también cineasta y escritor iraní Mohamad Nurizad se había declarado en huelga de hambre como protesta por las palizas que le había propinado el personal de la prisión de Evin, un centro penitenciario en el que permanecen encarcelados muchos opositores.
Decenas de miles de simpatizantes opositores fueron detenidos tras las protestas desatadas después de las elecciones del pasado mes de junio. La mayoría han sido liberados, excepto unos 80, que han sido condenados a penas de más de 15 años de cárcel. Dos de las personas sentenciadas tras las elecciones han sido ejecutadas.
