El subdirector del partido milicia libanés chií Hezbolá, Naim Qassem, ha afirmado que su partido apoya el diálogo entre los partidos libaneses y ha expresado su predisposición a discutir la estrategia de Defensa del país, pero sin renunciar a las armas, según ha informado el diario libanés ‘An Nahar’.
«No vamos a discutir el asunto de las armas de la resistencia. Su deseo de que dejemos las armas apoya el proyecto de Estados Unidos e Israel», ha señalado Qassem. «No hay ninguna guerra en el horizonte con Israel porque la determinación de Hezbolá les asusta (a Israel) y no serán capaces de conseguir sus objetivos. Saben que la capacidad de la resistencia es diferente de la que fue en la guerra de 2006», ha agregado.
Sobre el Tribunal Especial para Líbano, que investiga el asesinato del ex presidente libanés Rafik Hariri en 2005, Qassem ha asegurado que «el grupo político ha obstruido la voluntad del tribunal de prender fuego a la situación en Líbano».
«La Unión Europea y Estados Unidos cooperarán con este Gobierno porque sus intereses se verán amenazados. Este Ejecutivo tendrá relaciones regionales e internacionales», ha añadido.
Por último, ha señalado que el Tribunal Especial para Líbano está «politizado y alejado de la realidad de Líbano» y que es una «herramienta utilizada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas». «Van a usar el tribunal cada vez que quieran hacer algo en contra de Hezbolá», ha apostillado Qassem.
