BAGDAD, 8 (Reuters/EP)
Irak ha decidido retrasar la entrega de las competencias de seguridad de las ciudades a las fuerzas federales y locales de la Policía iraquí porque, según ha explicado el portavoz del Ejército en Bagdad, general Qasim al Musaui, aún no están listos.
Irak había planeado retirar las tropas militares del interior de las ciudades a finales del año y dejar a la Policía al cargo de la seguridad. Sin embargo, el Ministerio del Interior está en contra de esta decisión ya que considera que no están preparados para contener a los insurgentes suníes y a las milicias chiíes.
«Por el momento, no hemos alcanzado el grado de seguridad necesario para entregar por completo las competencias de seguridad al Ministerio del Interior», ha señalado el portavoz del Ejército en Bagdad, general Al Musaui en una entrevista.
«Al Qaeda y otros terroristas siguen siendo una fuente de preocupación para las fuerzas de seguridad. Todavía tenemos trabajo que hacer para cerrar las brechas por las que el enemigo está tratando de acceder», ha argumentado Al Musaui, quien también ha señalado que las fuerzas policiales carecen a menudo de las capacidades de inteligencia para rastrear a los insurgentes en regiones como Anbar, Diyala, Mosul o Saladino.
Los recientes ataques e incidentes registrados en la región suní de Anbar en el oeste de Irak y en la ciudad santa chií de Kerbala han avivado las preocupaciones del resurgimiento de la violencia sectaria.
Alrededor de 44.000 militares de Estados Unidos permanecen en Irak, pero en un principio está previsto que se retiren a finales de año. Ambos países están en conversaciones para determinar si algunas tropas permanecerán en Irak para formación y asesoramiento, aunque la inmunidad legal de los militares estadounidenses está complicando las negociaciones.
