Las palabras del primer ministro se producen el día después del ataque sobre una escuela de Naciones Unidas en Yabalia
Israel no se detendrá. El objetivo de su operación militar es destruir toda la red de túneles de Hamás en la Franja de Gaza y no cesará en su empeño hasta haber conseguido este objetivo.
Este es el mensaje que ha lanzado este jueves 31 de jukio de 2014 el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, después de reunirse con los miembros de su gabinete de crisis.
Netanyahu ha asegurado que Israel destruirá los túneles «con o sin alto el fuego», unas palabras que coinciden con el anuncio de la movilización de 16.000 reservistas.
Con ellos, la cifra total de efectivos movilizados por el Ejército israelí en su ofensiva en Gaza alcanza los 86.000. Sin embargo, según medios locales citados por Efe, Netanyahu no está interesado en expandir la ofensiva en Gaza y sopesa una retirada unilateral tras detonar todos los corredores subterráneos encontrados hasta ahora y construidos por Hamás
ATAQUE A UNA ESCUELA DE NACIONES UNIDAS
Las palabras del primer ministro se producen el día después del ataque sobre una escuela de Naciones Unidas en Yabalia, al norte de la franja, condenada por Estados Unidos y por UNRWA, la agencia de la ONU para la asistencia a los refugiados palestinos que gestionaba las instalaciones.
Según la UNRWA, la artillería israelí atacó el edificio a pesar de haber sido informada en reiteradas ocasiones de que en su interior se refugiaban cientos de civiles. El bombardeo causó 20 muertos y decenas de heridos, la mayoría mujeres y niños.
Investigación del Ejército
El Ejército israelí acusa a Hamás de utilizar las instalaciones de la ONU como escondite para su armamento y la propia Naciones Unidas ha informado del hallazgo de arsenales, al tiempo que hacía un llamamiento a ambos contendientes a respetar la neutralidad los recintos bajo su protección.
Un portavoz militar israelí aseguró que el Ejército ha abierto una investigación sobre la matanza de Yabalia y reiteró que «nuestros objetivos no son civiles».
Desde que el 8 de julio Israel pusiera en marcha la operación Margen Protector, 1360 palestinos han muerto como consecuencia de sus operaciones en Gaza y la ONU estima en unos 425.000 los gazatíes que han tenido que abandonar sus hogares.
En el mismo periodo han muerto 55 israelíes, la mayoría militares, y un trabajador tailandés alcanzado por uno de los cohetes lanzados contra suelo israelí desde Gaza.