Hamas demostró, una vez más, que no está dispuesto a cesar en sus ataques a Israel.
El grupo terrorista, pese a rogar un cese al fuego, mantiene su pensamiento de acabar con la existencia de Israel y su población.
Mahmoud az-Zahar, uno de sus cofundadores, lanzó un rotundo “no” cuando un periodista extranjero le pregunta si el Estado de Israel tiene derecho a existir. Y agrega desafiantemente: “¿Por qué? ¿Por qué?”.
Luego de 11 de días de confrontaciones, el pasado viernes 21 de mayo entró en vigor el alto el fuego entre Israel y Hamas.
Hamas y la Yihad lanzaron más de 4.300 cohetes hacia Israel, una intensidad nunca vista contra ese país, que dispone del avanzado escudo antimisiles “Cúpula de Hierro” que interceptó el 90% de los proyectiles.
No obstante, la cifra ya es mayor dado que poco después las sirenas volvieron a sonar en ciudades sureñas como Ashdod y Ashkelon. Y lo hicieron de nuevo en la misma zona minutos después de que se anunciara el cese al fuego.
Los enfrentamientos causaron más de 230 muertos del lado palestino, y 12 en Israel, entre ellos un niño de seis años, una adolescente de 16 y un soldado.
Por otra parte, el ministro de Defensa de Israel, Benny Gantz, abogó por “fortalecer la Autoridad Palestina” con el objetivo de no dejar que el grupo terrorista Hamas sea “el que establezca la agenda, ni en el área de la Franja de Gaza ni en la propia Ciudad de Gaza”.
Gantz aseguró, en este sentido, que para evitar futuros enfrentamientos violentos como el de los últimos once días, el cual llegó a su fin con un alto el fuego, Israel debería dirigir sus esfuerzos a apoyar a la Autoridad Palestina a la reconstrucción de Gaza, en lugar de Hamás, que gobierna el enclave.
En referencia a las últimas hostilidades, el responsable de Defensa consideró que la ofensiva fue un éxito en tanto a debilitar a Hamas y sus capacidades militares, mientras que enfatizó la necesidad de, en un futuro eventual enfrentamiento, responder con más fuerza.