Maldad sin límites

Cersei Lannister se aferra al poder con una fuerza que desespera a muchos seguidores de Juego de Tronos

Maldad sin límites
Juego de Tronos. JT

Juego de Tronos es una serie que engancha porque dispone de todos los ingredientes para contar una historia. En todo relato hay fuerzas del bien y del mal que dirimen una lucha por hacerse con el control. Una de las representantes del lado más oscuro en esta saga es Cersei Lannister. La actual reina no tiene límites morales e intentará, por los medios que sean, quitar de enmedio a quien ponga en duda su reinado o el de su familia más directa.

La reina ha causado mucho mal, pero también ha recibido golpes duros de encajar. La muerte de su hijo Joffrey Baratheon fue una de las peores noticias para la reina. El rey, pese a sus evidentes carencias y maldad, era su ‘niño’. Su asesinato hundió más en el abismo a Cersei, que redobló sus esfuerzos por apretar el lazo en lo que cree suyo, el Trono de Hierro. Ahora, sin Jaime a su lado, su futuro se vuelve más oscuro.

Se lo ha ganado a pulso. Es uno de los personajes que más antipatía despierta entre los aficionados de la serie. También es verdad que tiene ese magnetismo que desprenden los villanos en cualquier serie que se precie. La reina, junto con los ya difuntos en Juego de Tronos, Joffrey Baratheon y Ramsay Bolton, son tres de los más odiados entre los fans.

Juego de Tronos tiene ya en marcha el rodaje de su octava temporada, una que promete ser la más espectacular. Los gestores de la serie pondrán a disposición de su equipo de grabación 15 millones de dólares por capítulo, una inversión de gran nivel que garantiza que contarán con los mejores medios y actores para trasladar a las casas el especial universo que genera Juego de Tronos.

Los números hablan por sí solos del impacto que ha tenido la serie entre los espectadores. Ha cosechado 38 premios Emmy y la temporada pasada, la séptima, se descargó ilegalmente un billón de veces.

Juego de Tronos, que se ha visto en 170 países, trasciende más allá de la pequeña pantalla. Un ejemplo claro es la repercusión que ha tenido Khaleesi, la madres de dragones. En concreto, ya se han registrado 160 niñas con ese nombre desde 2012.

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