Donald Trump, el magnate estadounidense y precandidato presidencial republicano, declaró la semana pasada en una entrevista con la columnista del «New York Times», Maureen Dowd, que «Hedi Klum lamentablemente ya no es un diez» (Donald Trump: A la moderadora del debate le salía sangre de su… donde sea»).
Esta declaración hacía referencia a por qué Trump, en plena campaña política, tiene más éxito televisivo que la modelo y presentadora (El ‘bocachancla’ Trump dice que obligará a México a pagar por el muro en la frontera con EEUU).
La top model alemana, de 42 años, respondió este 17 de agosto de 2015 a las despectivas palabras del candidato republicano a través de un divertido vídeo lleno de humor que ha colgado en Instagram (Después de insultar a los mexicanos, el multimillonario Donal Trump demanda al chef José Andrés).
En la grabación, Heidi Klum posa para un fotógrafo con una camiseta que tiene un cartel con el número 10 cuando un hombre con una careta de Donald Trump se acerca para arrancarle la pegatina, dejando a la vista otro cartel en el que se lee el número 9.99.
Tras esto, la modelo mira su nuevo cartel, se encoge de hombros y sonrie igualmente, queriendo dar a entender que el comentario del magnate no le importa demasiado.
El vídeo estaba acompañadop de los hashtags #TrumpHaHablado #Tristemente #Nuncamásundiez #YoTeníaPosibilidades #LaBellezaEstáEnElOjoDelQueMira
Polémica entre Trump y una periodista
Para más inri, el pasado 11 de agosto de 2015 Donald Trump volvió a la cadena Fox tras la polémica por sus comentarios sobre Megyn Kelly, una presentadora de esta cadena que moderó el primer gran debate televisado de cara a las elecciones de 2016 en Estados Unidos.
En éste, Kelly hizo preguntas incisivas al precandidato, y al día siguiente Trump, en una entrevista para la CNN, criticó la dureza de la periodista, de quien dijo que «le salía sangre de los ojos» y de «donde quiera que sea»
El comentario fue interpretado como una insinuación de que la presentadora fue dura con él porque tenía la menstruación, y le ha valido a Trump las críticas de muchos rivales, además de ser vetado de una importante reunión en Atlanta en la que había sido invitado.
Durante el fin de semana, Trump se negó a disculparse por sus comentarios sobre Kelly, insistió en que se malinterpretaron y aseguró que «estima» a las mujeres.
«Siempre he sido bueno con las mujeres y no habrá nadie mejor para ellas (que yo) como presidente».
