Aznar ha vuelto a opinar y con dureza sobre la actualidad política española. En la semana que el Estatuto catalán ha llegado al Congreso y desde México, ante cientos de empresarios, el ex presidente ha lanzado un mensaje estremecedor sobre la situación política de España.
"Estamos en uno de los momentos más críticos de nuestra historia en muchas décadas y probablemente abocados a una grave crisis nacional; en poco más de un año, el actual Gobierno y su presidente han llevado a España al borde del abismo; España corre riesgos serios de desintegración y de balcanización... y de volver históricamente a las andadas".
José María Aznar afirmó ayer que la derrota electoral del PP en 2004 estuvo motivada por el uso que la oposición hizo de los ataques terroristas del 11-M que sentó 'un precedente peligrosísimo para muchas democracias del mundo'.
En el Foro Mundial de Negociación celebrado en la capital mexicana, al que asisten varios cientos de empresarios, Aznar señaló que los mayores retos de su carrera política los tuvo ante el terrorismo, con el cual no valen negociaciones de ningún tipo.
'Hay momentos electorales en muchos países que son especialmente delicados porque los terroristas pueden actuar, y porque puede haber gente con la tentación de hacer lo mismo que se hizo en España', explicó el ex presidente del Partido Popular (PP, conservador).
'Los terroristas que actuaron en España tenían un objetivo, uno: que era provocar una situación que determinase un cambio de Gobierno', indicó Aznar.
'Pero que una oposición política responsabilice de un ataque terrorista al Gobierno y no a los terroristas, es algo que no tiene precedentes en ninguna parte, y que constituye un precedente peligrosísimo para muchas democracias del mundo', aseguró.
Aznar se mostró convencido de que el PP hubiera ganado las elecciones 'si no llega a ser porque la oposición de entonces utilizó los ataques del 11 de marzo (de 2004) para responsabilizar de ellos al Gobierno, en lugar de a los terroristas, cosa que no había pasado nunca en ningún país (...) y cosa que es enormemente grave'.
El político conservador, hoy director ejecutivo de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), dijo que las negociaciones más complejas que enfrentó durante su carrera política fueron las celebradas en el seno de la Unión Europea (UE) en Alemania (1999) y las relacionadas con el Tratado de Niza y la Constitución Europea (CE), después.
Sin embargo, recordó que las decisiones políticas más difíciles de su carrera siempre tuvieron que ver con el terrorismo.
En particular singularizó entre ellas el chantaje a que fue sometido cuando gobernaba con el secuestro del concejal popular Miguel Angel Blanco, asesinado por la banda terrorista ETA en julio de 1997.
'Yo recibí un mensaje diciendo que si en el plazo de 48 horas yo no ordenaba el traslado de unos terroristas a cárceles del País Vasco, pues sería asesinado', dijo Aznar.
Se mostró convencido de que la orden de asesinar a Blanco estaba ya dada cuando él debió tomar la decisión, que finalmente fue de no reubicar a los miembros de ETA.
'Y no cediendo al chantaje los terroristas asesinaron pero tuvieron una grandísima derrota: tuvieron todo un país enfrente y no pudieron decir ni podrán decir nunca que obtuvieron una victoria, porque los derrotaron', añadió.
'España es mejor, mejor, después de eso, pero esos son momentos personales, momentos difíciles, y es la tarea dura de un gobernante.Tú tienes el último teléfono, la última decisión, y tú la tienes que tomar', agregó.
En su intervención defendió que 'en la vida política es imprescindible saber negociar, pero mucho más imprescindibles son los principios'.
'Para algunos tener principios es algo anticuado, molesto, y además no merece la pena. Para mí, tener principios es la mejor garantía que los hombres pueden tener, y las mujeres, los ciudadanos, los seres humanos para ser libres', dijo Aznar.
A la conferencia del ex presidente del Gobierno español, celebrada en el World Trade Center (WTC) de la capital mexicana, acudieron varios centenares de personas, la mayoría de ellos, empresarios.