Rojos, verdes y amarillos,
Los pimientos «espencados»
Bien que nos saben a gloria…
En Política sus brillos,
Juntos como separados,
Nos alumbran otra historia
Si antes o tras juntarlos,
No podemos ahuyentarlos…
Los Rojos por sus desmanes,
Los Verdes por su inopia,
Los Amarillos por nada;
Cada cual con sus afanes,
De sus votantes se apropia
Con derecho de pernada…
Hoy, con o sin ansiolíticos,
Nos sientan mal los Políticos…
Según color, sus glosarios,
Sus aplausos denigrantes
Y de los cisnes el canto:
El Rojo por sanguinarios,
El Verde por ignorantes
Y el Amarillo por llanto…
No estar a tanto color
En Política es mejor…
Esta ciencia, oficio o arte,
En los frutos de la huerta
De tan distinto sabor,
Claro que no tiene parte;
Es una playa desierta,
Donde maduran rencor,
Odios y resentimientos,
Pero nunca… ¡los pimientos!.