I
El Sánchez no es solo él,
Más que Dios, que es uno y trino,
Él es muchas más personas:
Si al alba tal que laurel,
Y a mediodía espino,
Rosa o clavel es a nonas;
Toda clase de cultivos,
Sea en secano o en huertos,
Que igual da muerte a vivos,
Que resucita los muertos…
Si una de cal un día,
El otro otra de arena,
Y el tercero no se sabe
Si nos dará alegría
O nos dará mucha pena,
Pues cualquier cosa en él cabe;
Cuando de él se espera una,
Él nos sorprende con otra,
Pues sabe sin duda alguna
Que siendo lo suyo potra,
Seguir siendo Presidente
Del Gobierno ha de estar
Siempre al sol que más calienta:
Hoy dándole a uno puente
Y a otro mañana mar,
Y a todos poleo y menta,
No les dé un dolor de tripa
Y cual La Lola a los puertos,
O como Herodes Agripa,
Se vaya o le den entuertos,
Y su tiempo en el cargo,
Porque no haya sido largo,
No como un breve letargo,
Sino como el más amargo
Lo recuerde sin embargo.
II
Pedro el Ridículo Mayor que se ha visto,
No es que lo haya hecho en alguna ocasión,
Es que lo tiene tal como un gran don,
Pues haciéndolo consigue darse pisto,
Que al fin y al cabo es su única ambición…
Para ello de los modos se ha provisto,
Que aprovechando un momento, ¡Santo Cristo!,
Siendo aún Presidente de la Nación,
Además lo tomen como Rey de España,
Pues que dada la actual situación
Del País, al pie de una secesión,
Al Rey Felipe Sexto que le den caña…
Señor Sánchez: si solo es darse jabón,
Otro resbalón… ¡y se jodió la cucaña!.
