No es normal que los gobiernos intervengan hasta en la intimidad de las personas
El presentador de El gato al agua, Antonio Jiménez, anunció que la portada de La Gaceta del día siguiente destacaba que el Instituto Catalán de Salud «recomienda sexo oral» a los menores.
El habitual tertuliano y director de Buenos días, España en Radio Intercontinental, Eduardo García Serrano, entró inmediatamente al trapo:
«[La consejera de Sanidad de Cataluña] es una guarra, una puerca y está fabricando degenerados».
Después, hizo la siguiente reflexión:
«Estamos en un país verdaderamente siniestro, se nos prohíbe fumar, pero desde la Consejería de Sanidad de Cataluña, esta guarra les anima a meneársela y a practicar sexo oral».
Y, como es habitual en él, recurrió a la cultura para seguir argumentando:
«En la antigua Roma había unos esclavos, los esprintías, que eran especialistas en darle a los patricios todo tipo de divertimentos sexuales atroces, y que utilizaban niños muy pequeños en esas orgías, los sodomizaban.»
Qué duda cabe de que las afirmaciones de García Serrano son gruesas y, en gran parte, gratuitas. Por este motivo, el director del programa, Antonio Jiménez, ya ha pedido disculpas en antena y por carta a la consejera de Sanidad de Cataluña.
Además, el propio García Serrano ha anunciado que se retractará de estos insultos y se disculpará por ello en su próxima aparición en «El gato al agua».
Pero no hay que olvidar que este tipo de recomendaciones no son propias de instituciones democráticas.
Últimamente, se escuchan muchas voces con sugerencias de este tipo por parte de las administraciones públicas, y pocas reclamando el sacrificio, la exigencia y la austeridad que reclama la sociedad a la juventud española.
No es normal que los gobiernos intervengan hasta en la intimidad de las personas, y menos aún en la de los menores de edad. Lógicamente, deben contribuir a una educación sexual, pero los políticos y los funcionarios no pueden convertirse ni en sexólogos ni en profesores de esta materia.
Por otra parte, los calificativos de ese tipo desautorizan a quien los enuncia. La actuación de Marina Geli no es, en absoluto instintiva, sino consecuencia de la estrategia global de ingeniería social que ha puesto en marcha el PSOE, con su líder, José Luis Rodríguez Zapatero, a la cabeza.
VERDAD MENTIRA
Elena Salgado: «La oposición es el peor enemigo de la recuperación»
Juan Carlos Escudier: «Zapatero no tiene un problema fuera, ya que a base de decretazos cualquiera termina por superar sus complejos, sino dentro»
Enric Sopena: «Los populares han conseguido que calara en la opinión pública una rotunda y solemne mentira: la de convertir a Zapatero en el hacedor de todos los males, como si de él dependiera la economía mundial»
Luis María Anson: «Tras la operación anti-Bono está la mano hábil y sinuosa de Cospedal»
Carmen Gurruchaga: «Si es por decretazo, la reforma laboral se debería haber hecho mucho antes»
Justino Sinova: «Esta reforma laboral va a acabar con muchos años de poder de los sindicatos»
Leire Pajín: «Hay crisis económica, pero no política»