EL MEJOR ESCRIBANO ECHA UN BORRÓN

(O DOS, O TRES, O…)

Hoy, domingo, 11 de abril de 2010, en la página 78 de Diario de Navarra leo, bajo el rótulo de CITAS, la siguiente sentencia entrecomillada: “Nunca mejora su estado quien muda solamente de lugar y no de vida y costumbres”, que el o la responsable errado/a de la sección atribuye a “Baltasar Gracián (1580-1645), POETA ESPAÑOL (sic)”.

Vaya por delante el reconocimiento (que no miento) de que todos, absolutamente todos los seres humanos, sin excepción, nos equivocamos (a veces, morrocotudamente, sí). El refranero español, en torno al asunto en cuestión, recoge, entre otras, las siguientes paremias: “el que tiene boca se equivoca (y el que tiene culo sopla)” y “el mejor escribano echa un borrón”.

Está claro, cristalino, que el epígrafe citado lo podrá leer el lector o lectora que corone la “Historia de la vida del Buscón, llamado don Pablos, ejemplo de vagabundos y espejo de tacaños” (publicada por vez primera en 1626, en Zaragoza), escrita por don Francisco de Quevedo y Villegas, pues el último de sus párrafos dice de esta guisa:

“La justicia no se descuidaba de buscarnos; rondábanos la puerta, pero, con todo, de media noche abajo, rondábamos disfrazados. Yo que vi que duraba mucho este negocio y más la fortuna en perseguirme, no de escarmentado, que no soy tan cuerdo, sino de cansado, como obstinado pecador, determiné, consultándolo primero con la Grajal, de pasarme a Indias con ella y ver si mudando mundo y tierra mejoraría mi suerte. Y fueme peor, como V. Md. verá en la segunda parte, pues nunca mejora su estado quien muda solamente de lugar y no de vida y costumbres”.

Las fechas de nacimiento y muerte que da el equivocado autor o autora son las de Quevedo (Gracián nació en 1601 y murió en 1658). Gracián es reconocido mundialmente por lo que escribió, excelente prosa.

Ángel Sáez García
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