El líder opositor se ha convertido en un ícono de la lucha por la liberación de Venezuela del chavismo

Leopoldo López, seis años de su vía crucis por Ramo Verde: de la tentación de Zapatero a resguardarse en la Embajada de España

Leopoldo López, seis años de su vía crucis por Ramo Verde: de la tentación de Zapatero a resguardarse en la Embajada de España
Leopoldo López PD

Las palabras de Leopoldo López aún se repiten en la mente de los venezolanos: «Soy inocente. No tengo nada que temer». El líder político ha pasado seis años desde el instante en que se convirtió en un preso político de la dictadura chavista tras convocar a una gran oleada de protestas contra Nicolás Maduro, el sucesor del tirano Hugo Chávez. Una decisión que, si bien democrática, le sirvió de excusa a los bolivarianos para culparle de los 40 muertos y centenares de lesionados que dejó la represión de las fuerzas policiales y paramilitares chavistas.

El 12 de febrero se convocó una manifestación por el Día de la Juventud y en protesta por unos estudiantes detenidos (todos presos políticos y sin juicios transparentes). En Caracas, la marcha llegó hasta Fiscalía, en el centro de la capital. El objetivo era pedir la liberación de los jóvenes, capturados días antes mientras protestaban en el interior del país.

Esta marcha marcó dos hitos. Primero, porque suponía la entrada de una marcha opositora en una zona considerada como un tradicional bastión del chavismo y segundo porque fue el arranque de una oleada de protestas que se prolongaron durante cuatro meses en el país.

Tras permanecer en los alrededores de Fiscalía, hubo enfrentamientos entre los estudiantes y los «colectivos», grupos de civiles frecuentemente armados que se consideran defensores de la Revolución Bolivariana y considerados paramilitares por la oposición y grupos de derechos humanos. Tres personas murieron ese día, decenas resultaron heridas y más de 60 fueron detenidas, según datos de la entonces fiscal general Luisa Ortega Díaz, hoy en el exilio.

Ramo Verde

El Gobierno culpó a Leopoldo López de la violencia del 12 de febrero. Como suele pasar en Venezuela, la justicia dio la razón al chavismo en una demostración más de que no existe la separación de poderes. Los tribunales emitieron una orden de arresto contra él, acusado de diferentes cargos, entre los que se contemplaban instigación a daños a la propiedad pública, incitación a crear disturbios, conspiración, homicidio y terrorismo.

Tras varios días en paradero desconocido, López se entregó el 18 de febrero rodeado de miles de seguidores y fue recluido en la cárcel militar de Ramo Verde. Su paso por la prisión fue un verdadero vía crucis, dejándole incomunicado de su familia, siendo puesto a prueba su voluntad política y presionándole tanto física como mentalmente. Uno de los puntos más polémicos fue la conocida ‘tentación de Zapatero’.

Mientras Leopoldo López buscaba métodos para denunciar que le estaban torturando en la prisión militar, el expresidente español le intentó comprar el ‘alma, así como indicó la diputada Cayetana Álvarez de Toledo’:

Finales del pasado mes de mayo. Nueve y media de la noche. Ramo Verde ya está a oscuras. Leopoldo López dormita en su camastro. De pronto, un militar aporrea su puerta: «¡Levántese! Han venido a verle la ministra de Exteriores y el presidente Zapatero». Leopoldo baja a la segunda planta. En una sala sórdida, ante una mesita de plástico, conversa con los emisarios de Maduro. No es la primera vez que Leopoldo habla con Zapatero. Hace un año, en junio de 2016, el expresidente español había logrado lo que ningún otro dirigente venezolano o extranjero: visitar a Leopoldo en prisión. Su misión, apoyada por El Vaticano y el Gobierno de Obama, era impedir el revocatorio de Maduro.  Leopoldo defendió el derecho constitucional de los venezolanos, pero otros miembros de la Unidad flaquearon. Y Lilian acabó encadenada a una columna de la Plaza de San Pedro.

Este segundo encuentro se produce en plena represión contra la oposición con muertos en las calles y el régimen chavista en descomposición:

Esta vez Zapatero opera más sibilinamente. Habla con Leopoldo de política. Más de dos horas. No le pide nada y le hace una oferta difícil de resistir: casa por cárcel. Lilian, los niños, la familia. Le dice que volverá al día siguiente. Y así lo hace. Al menos seis veces en tres semanas. Y paulatinamente la propuesta de Zapatero va desvelando su cara b.

El chantaje de Zapatero consiste en que Leopoldo llame a parar las manifestaciones contra Maduro a cambio de su libertad:

Para volver a casa, Leopoldo tendrá que desactivar las protestas callejeras y apoyar la convocatoria de una nueva Asamblea Constituyente. Es decir, renunciar a la salida democrática y aceptar la perpetuación del régimen. Leopoldo vuelve a rechazar el chantaje. Y, a través de dos vídeos, presumiblemente filtrados por guardias afines -que los hay y cada vez más- se reafirma en la resistencia cívica y proclama que las Fuerzas Armadas tienen el derecho y el deber de rebelarse contra la dictadura. La consecuencia es más represión. Fusilamientos en la calle y los gritos del viernes.

https://twitter.com/LeopoldoLopezG/status/1229756895298281472?s=20

La embajada de España

Lejos de aceptar la manipulación de Zapatero, Leopoldo López permaneció en Ramo Verde hasta que en julio de 2017 le cambiaron la medida por arresto domiciliario. Una situación que rápidamente se colocó como una medalla el expresidente español, pese a que seguía detenido un preso político por capricho de una tiranía. Sólo había cambiado la celda.

La mentira de Zapatero quedó demostrada, una vez más, cuando el fiscal encargado del caso, Franklin Nieves, huyó a Estados Unidos y declaró que el juicio fue «una farsa», mientras que la jueza que firmó su orden de aprehensión dijo que lo hizo «atemorizada».

Después del fallido levantamiento militar del 30 de abril de 2019 liderado por Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado por más de 50 países, López fue recibido como huésped en la residencia del embajador de España, donde aún permanece.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

José Antonio Puglisi

Periodista italovenezolano especializado en economía y periodismo de investigación.

Lo más leído