La verdad detrás de las misiones en Haití y Cabo Verde

348 médicos esclavizados por Cuba son pagados por países de la Unión Europea

Según la investigación de Cuban Prisoners Defenders, Noruega y Luxemburgo pagan al régimen cubano por los servicios de los médicos en Haiti.

348 médicos esclavizados por Cuba son pagados por países de la Unión Europea
Médicos cubanos.

La dictadura castrista sigue ganando dinero a expensas de la explotación de los médicos cubanos.

Según ha desvelado Cuban Prisoners Defenders este miércoles 3 de junio, los gobiernos de Noruega y Luxemburgo pagan los servicios de estos trabajadores enviados por Cuba a terceros países.

Este esquema de explotación que ha sido reconocido por Naciones Unidas como trabajo forzoso, una forma contemporánea de esclavitud.

El trabajo de la organización que forma parte de la UNPACU, ha desmontado con esto otra mentira de la dictadura cubana:

«Haití y Cabo Verde son dos misiones que hasta la fecha Cuba había indicado como ‘solidarias’. La verdad es otra. Cuba desplegó un sistema de lucro, denominado ‘Colaboración Tripartita’, mediante el cual un país sufraga a costes millonarios dicha ‘solidaridad’. Los médicos cubanos, por su parte, cobran un sueldo miserable que, como indicaban las Naciones Unidas, ‘no les permite vivir dignamente'», expresó en un comunicado Javier Larrondo, presidente CPD.

Además del esquema genérico de esclavitud investigado por Prisoners Defenders en otros países como Venezuela o como lo hicieran en Brasil denunciados por la ONU, Cuba despliega otro tipo de esquema de las «misiones de internacionalización». Haití y Cabo Verde son dos casos donde es especialmente difícil de comprender la forma en la cual se involucran estos dos países europeos: Noruega y Luxemburgo.

De acuerdo con la investigación, la brigada médica cubana que es explotada en Haití está compuesta por 348 efectivos, entre los cuales se desconoce cuáles son médicos titulados puesto que en no pocos casos, junto con los titulados, hay otros que terminan su carrera en la misión, hasta dos años, mediante prácticas, pero con la calificación y responsabilidad de médicos, practicando con pacientes reales y enfrentándose a situaciones para las que no están preparados académicamente con antelación.

En los casos denunciados por la ONU, el salario de estos médicos es cobrado por la dictadura cubana, y apenas les entrega el 25% de lo realmente pagado –el régimen se queda con el 75%–, les impiden ver a sus familiares,  les retienen los contratos, les obligan a trabajar más de 64 horas a la semana, les restringen la libertad de movimiento y el derecho a la privacidad o las comunicaciones.

Pero, como si esto no fuera suficiente, la legislación de Cuba prevé penas de 8 años de prisión contra los trabajadores si deciden cambiar de trabajo o no volver a Cuba

Sin documentos ni identificación

El 80% de los médicos cubanos declaran no tener los títulos académicos en Haití, entre otras cosas porque les impiden sacar cualquier titulación de la isla, al igual que no pueden llevar consigo su pasaporte corriente, y la documentación que les permite entrar en el país es un “pseudo-pasaporte” cubano suigéneris, que no es el pasaporte corriente aduanero, azul, sino un documento cubano a medida denominado “Pasaporte Oficial”, de color rojo, que sólo les permite la entrada en el país de destino ya que infinidad de países no lo reconocen como el pasaporte cubano con derecho a los desplazamientos internacionales. Además, al llegar a Haití, los funcionarios de Cuba confiscan los pseudo-pasaportes rojos al 100% de los médicos cubanos, dejándolos oficialmente indocumentados.

La confiscación de los pasaportes y el impedimento para tener los títulos académicos es usada en las “misiones” médicas cubanas con el mismo fin que éstas confiscaciones se usan en la trata de blancas de esclavitud para la prostitución a lo largo del mundo: sin pasaporte y sin título, el médico cubano no es “nadie” ni puede desplazarse a ningún lugar.

La declaración de Naciones Unidas

El pasado 6 de noviembre de 2019 Naciones Unidas emitió una fuerte acusación a Cuba por esclavitud, trata de personas y trabajo forzado en las llamadas “Misiones”, en las que detalló: [5] “las condiciones de trabajo reportadas podrían elevarse a trabajo forzoso, según los indicadores de trabajo forzoso establecidos por la Organización Internacional de Trabajo. El trabajo forzoso constituye una forma contemporánea de esclavitud”, indicando que “entre 2011 y 2015 los profesionales contratados en el exterior habrían aportado a Cuba un promedio anual de 11 mil[6] millones de dólares”.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído