Evo Morales inició su golpe de Estado a Bolivia.
El gobierno de Jeanine Áñez identificó 60 cortes de rutas en seis departamentos de Bolivia por parte de grupos afines al expresidente Evo Morales.
Para frenarlos, anunció el uso inminente de militares y policías para terminar con los bloqueos, que dificultan la llegada de oxígeno esencial para hospitales en las ciudades de Cochabamba, La Paz, El Alto y Oruro.
“Tenemos los puntos álgidos [de bloqueos] y claramente las filmaciones que nos den los sobrevuelos nos darán la forma de actuar en los operativos que tengamos que hacer y que se harán en cualquier minuto”, afirmó el ministro de Gobierno (Interior), Arturo Murillo.
Murillo dijo que los organismos de inteligencia del Estado han detectado los principales puntos de bloqueo en las regiones de La Paz, Oruro (oeste) y Cochabamba (centro). También hay cortes en los departamentos de Potosí (suroeste), Santa Cruz (este) y Chuquisaca (sureste).
Los vecinos, campesinos e indígenas afines a Morales (2006-2019) comenzaron los bloqueos de caminos en rechazo a la decisión del órgano electoral de postergar los comicios generales del 6 de septiembre al 18 de octubre.
Las elecciones han sido aplazadas en dos ocasiones anteriores a raíz de la pandemia, que a la fecha causó 3.465 fallecidos y más de 86.400 contagiados en el país de 11 millones de habitantes.
Los manifestantes creen que las postergaciones sólo buscan perjudicar al candidato izquierdista Luis Arce, delfín de Morales, quien encabeza las encuestas de intención de voto por encima del ex presidente Carlos Mesa y la mandataria interina Jeanine Áñez.
Choques entre civiles
En los poblados El Puente y Samaipata, en la región de Santa Cruz, se registraron disturbios entre bloqueadores de rutas y grupos rivales, sin que se reportaran lesionados.
En El Puente se reportaron choques con piedras y palos y en Samaipata los manifestantes obligaron por la fuerza al cierre de todas las tiendas de comercio. Al caer la noche, los vecinos se organizaron para repeler otra arremetida.
El gobierno también denunció que los bloqueadores saquearon camiones que transportaban alimentos a las ciudades. “Están saqueando camiones, están robando”, dijo el ministro Murillo.
De manera paralela, la canciller boliviana Karen Longaric denunció ante el Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington “acciones violentas e inhumanas” incitadas, según ella, por Morales, refugiado en Argentina, y pidió a la comunidad internacional que censure esos hechos.
