La dictadura de Daniel Ortega pisa el acelerador y aumenta el número de presos políticos por temor a perder el poder.
La Policía Nacional nicaragüense informó que detuvo al economista José Adán Aguerri Chamorro, expresidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), principal patronal de Nicaragua, y a la dirigente opositora Violeta Granera.
Tanto el dirigente empresarial como la activista opositora fueron arrestados bajo la acusación de “incitar a la injerencia extranjera en los asuntos internos” y “pedir intervenciones militares” contra el régimen que preside el sandinista Daniel Ortega, dijo la Policía Nacional en una declaración.
Bajo esos mismos delitos, la Policía detuvo este martes a los aspirantes a la Presidencia de Nicaragua por la oposición Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro García.
La Policía aseguró que Granera, que aspiró a la Vicepresidencia de Nicaragua en las elecciones de 2016 y pertenece al Consejo Político de la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco, “permanece en su casa bajo custodia policial”.
Mientras el extitular del Cosep fue trasladado a las cárceles preventivas de la Dirección de Auxilio Judicial Nacional, en Managua.
“Ambos son investigados por realizar actos que menoscaban la independencia, la soberanía, y la autodeterminación, incitar a la injerencia extranjera en los asuntos internos, pedir intervenciones militares, organizarse con financiamiento de potencias extranjeras para ejecutar actos de terrorismo y desestabilización”, señaló la Policía Nacional.
También por “proponer y gestionar bloqueos económicos, comerciales y de operaciones financieras en contra del país y sus instituciones, demandar, exaltar y aplaudir la imposición de sanciones contra el Estado de Nicaragua y sus ciudadanos, y lesionar los intereses supremos de la nación”, agregó.