Las Fuerzas Armadas de Chile sufrieron un ataque cibernético que pone en peligro la seguridad del país latinoamericano.
Hackers accedieron a los correos electrónicos del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Chile y de momento se desconoce la magnitud del caso y si era delicada la información contenida en los mensajes, así lo informaron las autoridades.
El Ministerio de Defensa chileno dejó entrever la sensibilidad del asunto al informar en un comunicado el regreso urgente de la titular de la cartera, Maya Fernández, a Chile desde Estados Unidos por disposición del presidente Gabriel Boric.
“Ante la falla de seguridad de los correos electrónicos del Estado Mayor Conjunto, Fernández interrumpió su visita al país del norte”, agregó.
Fernández acompañaba a Boric, que permanece en Nueva York desde el lunes, donde participó en la Asamblea General de Naciones Unidas.
El gobierno ordenó un sumario administrativo para determinar las responsabilidades correspondientes sobre el hecho y entregó los antecedentes a la justicia militar, dijo el Ministerio de Defensa.
Según el periódico digital Interferencia, un grupo de hackers “reveló” miles de correos de entre 2019 y 2022 que contienen “documentos reservados” del Estado Mayor Conjunto, órgano asesor de las fuerzas armadas.
Fernández asistiría con Gabriel Boric a un acto en Nueva York en el que se recordaría el discurso de su abuelo, el derrocado presidente Salvador Allende, ante la asamblea anual de la ONU hace 50 años.
Gabriel Boric, reconoció en su discurso ante la Asamblea General de la ONU que asume “con los ojos y el corazón bien abiertos” el resultado del referéndum del 4 de septiembre en el que los chilenos rechazaron la propuesta de una nueva Constitución, y que confía en que el país logrará “a corto plazo” elaborar una nueva Carta Magna “escrita en democracia” y capaz de garantizar “un futuro de cambio con estabilidad”.
Boric recordó que ningún país está exento de movilizaciones como las que se produjeron durante el “estallido social” de 2019, del que están a punto de cumplirse los tres años.
Admitió que en esas manifestaciones ocurrieron “graves episodios de violencia” y una “represión descontrolada” por parte de las fuerzas de seguridad, pero subrayó que marcaron el origen de un “intenso proceso político” que se prolonga a día de hoy, ejemplo de un “malestar” y un “hastío” que “dejó perplejos a muchos observadores”.
Boric admitió que los chilenos rechazaron ese texto de “manera clara” y agregó que aunque él era partidario de la opción “apruebo”, no siente el fallido referendo como “una derrota” propia. “Nunca un Gobierno puede sentirse derrotado cuando el pueblo se pronuncia”, dijo.