Rosi Legido (Periodista Digital).- Poco se ha hablado hasta ahora de la primera dama de Bolivia, Esther Morales. Ahora será bien conocida en el gremio periodístico, que la acusa de humillar en rueda de prensa a los redactores no indígenas.
La responsabilidad de un cargo como el de Primera Dama de la Nación, y el estrés que ello conlleva, puede llevar a perder los estribos e, incluso, cometer errores de trato con el personal. Eso al menos es lo que Esther Morales Ayma, asegura haberle ocurrido, razón por la que pide disculpas públicas a las periodistas de tez blanca que humilló el pasado viernes.
En oportunidad del reconocimiento de la nueva Brigada Parlamentaria de Oruro en la Prefectura del Departamento, Esther Morales, antes de responder a las preguntas de los periodistas, se fijaba de antemano en la cara blanca y protestaba contra ellos, como si hubiesen sido los responsables de los 500 años de marginación de los campesinos.
La hermana del presidente de la República, Evo Morales, sostuvo que nunca pretendió atender mal a los periodistas, y que algunos seguidores la forzaron a salir para asistir a un acto que se realizó en el Servicio de Gestión Social (Sedeges).
Dicha coacción dio lugar al malentendido. “Francamente en ningún momento maltraté a la prensa y tampoco tuve intenciones de maltratar, sí pregunté de qué canal era, porque el Canal 2 (Red Unitel) siempre maltrató a la familia, por eso pregunté de qué canal era”, afirmó.
