Daniel Forcada (Periodista Digital).- “Guerra sucia contra la paz”. Así titulaba ayer Carlos Carnicero su columna de opinión en el diario El Plural. Una guerra sucia que ya no alude a la desarrollada por los GAL contra ETA, sino a la llevada a cabo por el Partido Popular y sus “zapadores mediáticos”: El Mundo y la Cadena COPE para sabotear los intentos del Gobierno por alcanzar la paz.
Carnicero, habitual en las tertulias de la Cadena SER y en 59 Segundos, en donde no deja pasar ni una al también tertuliano Pedrojota Ramírez, vuelve a arremeter una vez más contra el tandem periódistico El Mundo-COPE. Estos medios no son, a su juicio, leales a sus principios cuando critican ahora lo que aplaudían con Aznar. “Se sostienen las convicciones porque se cree en ellas y no por la ventaja que puedan reportar. Un debate sin lealtad es una trifulca en la que los truhanes no están sometidos a normas establecidas”, afirma.
La falta de lealtad se soporta, fundamentalmente, en el hecho incontestable que los dirigentes del PP y sus periodistas de cabecera intentan torpedear el proceso de paz en Euskadi, criticando sistemáticamente los mismos procedimientos que utilizaron y aplaudieron en la época en la que José María Aznar era presidente del Gobierno.
(…) Ahora se utilizan los más bajos procedimientos para boicotear cualquier posibilidad de una solución dialogada, llegando al paroxismo de denuncias de traición, deslealtad y abandono de las víctimas del terrorismo, tocando las fibras más sensibles de la sociedad en un intento de sabotaje político execrable. (…) Todas estas afirmaciones se hacen sobre supuestos de conveniencia, sin documentación alguna.
(…) Las mismas personas que sobre los cadáveres de casi doscientas personas siguen intentando sembrar la duda sobre la autoría del 11-M, sustentando que fue ETA la autora de la matanza de Atocha, buscan desesperadamente que la paz en Euskadi no se abra camino. Hoy, como el día de la barbarie de Atocha, piensan que la verdad les perjudica electoralmente.
