Miguel Pato (Periodista Digital).- El pasado día 10 la sede del diario El Mundo fue atacada por unos 60 radicales independentistas que concentraron frente al edificio portando pancartas en las que se podría leer “El Mundo criminalizador de la juventud vasca” y “Las vais a pasar canutas”. Asimismo, los violentos arrojaron sobre la fachada gran cantidad de periódicos manchados con pintura roja.
Ante estos lamentables sucesos, el periódico presentó, a través de sus servicios jurídicos, una querella criminal. Según publica el propio diario, sustentan la denuncia en cuento que hubo una concentración ilícita
“En virtud de lo dispuesto en los artículos 513.1 y 514.1 del Código Penal, que castiga a los promotores de la reunión cuando se celebra con el fin de cometer un delito, en este caso, el de amenazas y coacciones”.
Estuvieron concentrados unos 20 minutos al grito de «fascistas» e «independencia». Pasado ese tiempo, miembros de la Ertzaintza llegaron al lugar y trataron sin éxito de convencer a los jóvenes para que dispersaran la manifestación.
La querella interpuesta en juzgado señala que esta concentración no expresaba un desacuerdo con la línea editorial de El Mundo, algo que sería legítimo, sino que “a través de la amenaza sobre la integridad física y moral” de los trabajadores del El Mundo”, los violentos intentan cambiarla.
