La historia secreta del golpe en La Voz de Galicia

(Felipe Valdés, Periodista Digital ).- Transcurrido un mes desde que Bieto Rubido, uno de los periodistas españoles más brillantes, fue destituido como director de La Voz de Galicia, emergen los detalles de la turbia operación, en la que se mezclan las ambiciones del editor, las presiones políticas y las maniobras del Gobierno en Galicia.

La historia con lujo y detalles aparece publicada en Periodistas 21.

Juan Varela asegura en su blog que la relación entre Santiago Rey y Bieito Rubido está practicamente hecha añicos:

«Santiago Rey y Bieito Rubido ya casi no hablaban. La confianza entre editor y director de La Voz de Galicia se quebró lentamente y desembocó en la destitución del periodista al frente de la redacción del líder de la prensa gallega.

Rubido debió sospechar algo cuando el teléfono dejó de sonar tan a menudo como era habitual. A los directores les pasa como a los ministros. El teléfono calla y sabes que tu tiempo se ha agotado.»

El modelo del diario, su diseño, y, sobre todo, su línea editorial han sido -sobre el papel- los argumentos que han hecho añicos una relación -la de editor con el director- que es esencial en la marcha de un medio de comunicación y que obliga a rozarse muchas horas al día.

La tesis de Varela es que el apoyo del consejero delegado, José Gabriel González Arias -«quien llegó al periódico para limitar la autoridad y el poder de un director con una fuerte proyección externa y de ideas y decisiones rotundas»- ha sido un factor perturbador y determinante:

El director general atenazaba al director con sus presupuestos ajustados y la falta de autorización para nuevos contratos y proyectos.

La personalidad de Bieito Rubido, con prestigio en la profesión y una clara voluntad de dirigir, creaba celos en ciertos ámbitos de la empresa. A nadie se le escapa ahora, que el cambio en la dirección puede tener repercusione smuy negativas para un diario que -en difusión – se había colocado como el quinto de España.

La Voz de Galicia fue fundada en 1882 por Juan Fernández Latorre, pero fue especialmente la labor de Emilio Rey, padre del actual editor, la que convirtió al diario en la referencia hegemónica de la prensa gallega.

Santiago Rey regresó en 2002 al principal sillon del periódico para sanear los errores que antes habían dejados sus hijos.

Emilio Rey, el más joven, pilotó una expansión audiovisual y un intento de reflotar Diario 16 y tener una voz en Madrid que acabó con una deuda onerosa para la compañía y el fracaso de muchas de sus iniciativas.

Línea política

Todo son especulaciones, porque los protagonistas del drmaa no hablan, pero hay indicios de que en la jugada contra Bieto han intervenido gerifaltes socialistas. La Voz se ha caracterizado en los ultimos dos años por sus críticas a la gestión de Zapatero y a sus compromisos con el los nacionalistas del Bloque Gallego.

Dice Juan Varela, que «la marejada había amainado», pero que una información sobre la ministra Magdalena Álvarez, volvió a desatar la tormenta. En el club de fans de Bieito Rubido nunca ha estado la ministra, tampoco muy querida por el ex alcalde y ahora embajador en el Vaticano Paco Vázquez.

Bieto y La Voz no han dejado nunca de presionar para que se haga el AVE en fecha y para que la ministra cumplir las promesas del Plan Galicia, lo que produce urticaria en el gobierno y en la Xunta bipartita.

A Rey muerto, Rey puesto

La redacción del periódico está viendo ante sus ojos, desde la destitución de Rubido, como Santiago Rey está preocupado de controlar cada página que sale publicada.

Según se cuenta, el fax en casa de Rey ha funcionado este último tiempo más que nunca. Páginas y Páginas para su aprobación llegan a su casa cada día.

Un ejemplo fue el día del alto al fuego de ETA. Nueve eran las páginas preparadas sobre el tema. Rey sólo autorizó tres.

«En la redacción se preguntan cuál será el modelo de periódico que quiere este editor lanzado sobre su diario como muy pocas veces se recuerda en la prensa española.

Ya en septiembre pasado se lanzó como ariete contra la operación de Florentino Pérez para hacerse con el control de Unión Fenosa frente a las pretensiones de Amancio Ortega (Zara) y Jacinto Rey (Construcciones San José, accionista de Xornal.com, dirigido por el ex director más nacionalista de La Voz, y ahora en el capital de El Economista).

No se recordaba la voz tan airada de un editor español desde que los diarios se profesionalizaron».

Hombre leal

La situación actual que se vive al interior de las paredes de La Voz de Galicia es merecedora de un buen culebrón. personajes para todos los gustos. Uno de ellos es Xosé Luis Vilela, sobre quién muchos se preguntan si será el director adecuado para un editor omnipresente.

Vilela es descrito como uno de esos periodistas trabajadores de sol a sol, que no tiene la «pegada» del subdirector Luis Ventoso, ni la destreza para esribir que lleva en la sangre César Casal, subdirector de información local. Pero Vilela es «sosegado, cauto, inteligente y un gran conocedor del mercado de la prensa», y sobre todo leal.

Muchos han despositado en él la esperanza de arreglar silenciosamente las cosas por ser el verdadero «motor» del periódico, una publicación que se vive una drama profesional.

«La desconfianza del editor acaba con la carrera de un director y se temen recortes en la redacción, sobre todo para adelgazar un staff que acoge a cargos de otras épocas, de otros directores y de otras aventuras».

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído