(PD/Agencias).- Van a ser unas vacaciones a cuerpo de rey y por todo lo alto. Y para que no falte nada, el presidente Zapatero se lleva a Lanzarote 15 cocineros, que se encargarán -para disgusto de los hosteleros locales- de preparar los platos que él, su esposa, su suegra y otros parientes consuman en Canarias.
El próximo martes Zapatero inicia sus vacaciones en Lanzarote, en La Mareta, la lujosa casa reformada por el fallecido arquitecto canario César Manrique, y regalo personal de Hussein de Jordania al Rey Juan Carlos.
Las vacaciones estivales que comenzará en muy pocos días José Luis Rodríguez Zapatero en La Mareta, propiedad de Patrimonio Nacional, están causando sorpresa y malestar entre los hosteleros de la zona, algunos de los cuales consideran «inapropiado» que el presidente del Gobierno se lleve puestos los cocineros y no utilice, como suele ser habitual, los servicios de los especialistas de la isla canaria.
El jefe del Ejecutivo, que tanto ha hablado de austeridad, ha optado por llevarse en bloque a los cocineros de Moncloa. Se trata de 15 personas, lo que encarece el coste de la estancia. Los hoteles cercanos se limitarán exclusivamente a prestar labores de apoyo.
Los cocineros se suman así al amplio despliegue de personal que viaja a Lanzarote con la familia del jefe del Ejecutivo. El año pasado, este dispositivo fue de varios cientos de personas.
Los hosteleros canarios recuerdan que durante las estancias de los Reyes de España siempre han sido ellos los encargados de la comida, incluso señalan que en estos momento las Infantas se encuentran en la Isla de Lanzarote haciendo uso de los servicios de un hotel, donde pernoctan.
A día de hoy en la residencia veraniega de Rodríguez Zapatero se dan los últimos retoques, después de la gran obra que se realizó el año pasado para que el Presidente y su familia pudieran pasar allí las vacaciones.
LA MANSIÓN
Las reformas, servicio y mantenimiento, que se hacen en La Mareta, corren desde entonces a costa de los presupuestos generales del Estado. La mansión es propiedad de Patrimonio Nacional desde que el Rey Don Juan Carlos la cediera en el año 1991.
Los gastos que genera la lujosa mansión, son muy elevados. De hecho, Patrimonio Nacional destino más de 271.000 euros a las obras de mejora, y restauración con vistas a las primeras vacaciones de Zapatero en la isla.
Sólo en vigilancia, la casa tiene una nómina anual de 120.000 euros. El complejo residencial está formado por diez bungalows con salida a las dos piscinas de la residencia.
El lugar ha sido residencia de diversos jefes de estado y ha albergado también a José María Aznar, aunque José Luis Rodríguez Zapatero es el único presidente de gobierno que elige La Mareta como lugar de vacaciones.
El año pasado estuvo allí con su mujer y sus hijas el año pasado, y el hecho de que el coste de pintura de la cancha de baloncesto, -deporte que practica el Presidente- ascendiera a 9.000 euros fue muy criticado.
ZAPATERO SIGUE LA ESTELA DE OTROS «VERANEANTES PRESIDENCIALES»
Zapatero no es el único presidente de utiliza los bienes de Patrimonio Nacional para disfrutar de sus vacaciones de verano. Ya lo hizo Felipe González con el Azor, el Yate de Franco, o el Coto de Doñana.
Contra lo que pudiera pensarse, resulta mucho más económico para el Estado utilizar las instalaciones de Patrimonio Nacional y más efectivo a la hora de proteger las seguridad del Jefe de Gobierno.
Los gastos que generaba Aznar en seguridad cuando estaba en Oropesa eran mucho más altos. El ex presidente dejó de veranear allí cuando su hija Ana cortó con el noviete de juventud con el que salía por aquel entonces. La familia se alojaba en el chalet del dueño de Porcelanosa, pero el coste en seguridad resultaban mucho más elevados que en un edificio de Patrimonio Nacional.
Salvaguardar el perímetro en un lugar turístico como Oropesa requería de un número mucho mayor de escoltas, con todos los gastos que ello conlleva en hoteles y dietas. José Luis Rodríguez Zapatero, consciente de este hecho, prefiere utilizar las instalaciones de Patrimonio Nacional.
El complejo de la Mareta es un lugar de triste recuerdo para los Reyes. Allí falleció la Condesa de Barcelona y en ese lugar se encontraban de vacaciones cuando murió la Infanta María Cristina de Borbón y Battenberg, tía del Rey.
En la residencia canaria, que dispone de un terreno de 15.500 metros cuadrados, también disfrutaron de unas breves vacaciones los Príncipes durante las navidades pasadas acompañados de su hija, la Infanta Leonor.
EN MENORCA, COMO AZNAR
En su primer año en el poder, Zapatero siguió los pasos de Aznar.
José Luis Rodríguez Zapatero, en el año 2004 eligió Menorca para sus vacaciones. Concretamente una finca de propiedad privada, de nombre Santa Bárbara, propiedad de un matrimonio alemán.
José María Aznar había veraneado en la isla durante tres años consecutivos y ya se había creado una rutina a la hora de organizar la seguridad en la isla, motivo por el cual sus asesores le recomendaron encarecidamente seguir los pasos de su predecesor en el poder.
Precisamente en el año 2004 el Presidente tuvo un altercado con la revista 10 minutos, que publicó unas fotos de él y su familia en un yate en las que aparecían sus hijas Alba y Laura, a pesar de que el rostro de las niñas aparecía pixelado en la publicación.
A José María Aznar, sin embargo, le gustaba presumir de familia. Son incontables las fotos del ex presidente con sus hijos Rodrigo y Ana en las más diversas situaciones. Diferencia de talantes.
Los «Zapatero» no han vuelto a ser perseguidos por los paparazzi cuando van con sus hijas desde entonces, aunque Sonsoles no pudo librarse de ser inmortalizada hace unas semanas cuando paseaba con un bikini rojo por las playas de Marbella en compañía de Elena Benarroch.
En costa Teguise, en la Mareta, los fotógrafos lo tendrán mucho más difícil.
