(PD/Agencias).- El Procurador del Común en Castilla y León, Javier Amoedo, ha pedido al Ayuntamiento de Salamanca que adopte las medidas oportunas para impedir la exhibición directa de publicaciones pornográficas en los quioscos de la ciudad, demanda que extendió al resto de la autonomía para cumplir la legislación.
La resolución del defensor del pueblo de Castilla y León viene motivada por diversas reclamaciones planteadas por vecinos de la capital salmantina ante la «frecuente» exposición de material pornográfico, tanto en quioscos como en «sex shops«, en emplazamientos «de fácil visualización y acceso para los menores«.
Para atajar estas situaciones, Amoedo ha instado, según informaron fuentes de esta institución en una nota de prensa, a que el Ayuntamiento salmantino ordene la retirada de la exhibición pública del material pornográfico expuesto, «ejercitando, en caso contrario, la potestad sancionadora por la posible comisión de infracciones administrativas«.
Al respecto, recuerda que la legislación vigente en Castilla y León en el ámbito de la promoción, atención y protección a la infancia «prohíbe la venta, exposición y ofrecimiento a menores de contenido pornográfico que, igualmente, aparece tipificado como delito en el Código Penal«.
Una vez analizado este caso, Amoedo ha puesto su resolución en conocimiento de la Asociación de Vendedores de Prensa de España con el objetivo de que, junto a sus asociados de Salamanca y el resto de la Comunidad autónoma, emprenda las acciones necesarias para «salvaguardar los derechos de los menores«.
En este sentido, resalta que, en 2003, su homólogo madrileño firmó un documento junto a la Asociación de Vendedores Profesionales de Prensa de aquella comunidad instando a este colectivo a cooperar en esta tarea y hacer que «las publicaciones que pudieran resultar perjudiciales para los menores se situaran en estantes de difícil visualización y acceso para éstos«.
