Condenados dos redactores estadounidenses por no revelar sus fuentes

(PD / Agencias).- Dos redactores del diario estadounidense ‘San Francisco Chronicle’ han sido condenados a un máximo de 18 meses de prisión por haberse negado a revelar quién les filtró testimonios secretos de varios atletas, entre ellos el bateador Barry Bonds, ante el jurado del denominado ‘caso BALCO’.

Lance Williams y Mark Fainaru-Wada publicaron una serie de artículos y un libro basados en parte en transcripciones de los testimonios de Bonds, Jason Giambi y otros ante un jurado de instrucción que investigaba la Bay Area Laboratory Co-Operative, una compañía fabricante de suplementos nutricionales que resultó ser una banda comercializadora de esteroides según se descubrió hace dos años.

Ambos esgrimieron ante el juez Jeffrey White, encargado del caso, sus convicciones profesionales y el derecho a no revelar sus fuentes que recoge la Constitución. Sus revelaciones han servido para poner al descubierto el grave problema del consumo de sustancias prohibidas en el deporte profesional estadounidense.

Sin embargo, White les respondió que «nadie está por encima de la ley» cuando se trata de responder ante un gran jurado federal, según un dictamen del Tribunal Supremo de Justicia de 1972, que le ata las manos en este caso.

«La única sentencia apropiada es encarcelar a estos dos individuos»

ha comentado el juez White, que también se ha mostrado convencido de que recapacitarán cuando se enfrenten a la posibilidad de perder la libertad.

A la espera de una apelación

Los periodistas han presentado una apelación contra está decisión, y esperan que la sentencia sea revocada, aunque estará suspendida mientras no se resuelva la apelación. «Somos optimistas y creemos que vamos a recibir ayuda de la Corte Federal de Apelaciones«, ha comentado Fainaru-Wada, que da por segura su victoria en los tribunales.

«Sus demandas son imposibles, quieren que tira a la basura mi carrera y mi forma de vida (declaró Williams ante el juez White). Quieren que tire por la borda mis creencias éticas»

ha añadido tras denunciar que de ser condenados:

«Nadie querrá hablar con reporteros».

Necesaria ley de protección al periodista

Por su parte, Phil Bronstein, vicepresidente ejecutivo del ‘San Francisco Chronicle’, que acompañó en todo momento a los dos periodistas, dijo que era una auténtica tragedia condenar a dos profesionales que hacen un excelente trabajo. «Se necesita con urgencia una ley federal que proteja a los periodistas para que no tengan que revelar sus fuentes«, subrayó Bronstein.


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