En su intervención, el jueves, en el Fórum Europa, Carmen Caffarel aseguró que el Plan de Saneamiento garantiza el mantenimiento de una estructura territorial. Pero los hechos dicen otra cosa.
El sindicato USO denunció el desmantelamiento de la programación de Televisión Española en Canarias con la salida de dos programas. A ello se suma el fin de Radio 4, con emisiones íntegras en catalán y la reducción de los boletines locales. ¿Cuestión de criterios?
Puede ser, y es que todo depende de lo que unos u otros entiendan por ‘mantener la estructura territorial’, pero hay quienes no están de acuerdo con el positivo balance de su gestión que dio a conocer en su comparecencia de esta semana ante el Fórum Europa.
De momento, el sindicato USO ha acusado la salida de la parrilla para Canarias de La 2 del programa ‘Claves’, que difundía la labor del mundo artístico y literario de las islas. El mismo destino ha tenido el espacio de debate ‘Contrapunto’.
Para los representantes de los trabajadores la cancelación de estos programas, son claras señales del desmantelamiento de los Centros Territoriales.
Otro dato: el pleno del Congreso de los Diputados rechazó, con los votos en contra de PP y PSOE, una proposición no de ley de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) que pedía el mantenimiento de la actividad de la emisora en catalán Radio 4 dentro de la oferta de RNE y la ampliación de su cobertura a Valencia y a Baleares.
La iniciativa apelaba a favorecer la rentabilidad social y cultural frente a la rentabilidad económica. De momento, las desconexiones en lengua catalana se limitarán a 30 minutos diarios tanto en la radio como en la televisión estatal.
Al parecer, éste será el camino a seguir. USO adelantó que, además de la desaparición de estos dos programas, los contratos de TVE con los equipos de lucha canaria expiran a final de diciembre próximo, por expreso deseo de RTVE.
Por tanto, la próxima desaparición de la parrilla será la del programa ‘La Luchada’. La semana pasada os contamos que los boletines locales de RNE también se han reducido a su mínima expresión, lo que según los sindicatos es el comienzo del recorte de la plantilla de estos centros.
Para los sindicatos, la etapa de Caffarel, lejos de garantizar el mantenimiento de la estructura territorial, se va a caracterizar por el desmantelamiento de sus instalaciones y delegaciones en comunidades que, como Canarias, están geográficamente aisladas. Y los ánimos se caldean aún más cada vez que se da a conocer lo que consideran un ‘despilfarro en programas fracasados y de dudoso servicio público además del abono millonario a tertulianos y ‘estrellas’ de incierto fulgor’.
La incertidumbre persiste sobre el verdadero destino de la estructura territorial del Ente. No es lo mismo sostener una delegación con una persona que con un equipo de profesionales que trabajan en la producción de programación propia ¿Qué entiende Caffarel por mantención de la estructura territorial?
