Elena de Regoyos (Periodista Digital).- No es baladí el estricto protocolo que rodea cada movimiento de la Familia Real. Sin embargo, este fin de semana los Príncipes de Asturias se lo saltaron a la torera dando rienda suelta a una encendida polémica.
No ha sentado nada bien a la prensa española, concretamente a toda la que no pertenece al Grupo Prisa, la exclusiva que Don Felipe y Doña Letizia concedieron a El País Semanal (EP[S]) con motivo del XXV aniversario de los Premios Príncipe de Asturias.
En dicho reportaje, que firmaba Jesús Rodríguez y con fotografías de la pareja en Zarzuela, se incluye una carta del Príncipe Felipe a los lectores de El País, que empieza así:
«A gradezco cordialmente al diario El País la feliz iniciativa de dedicar este suplemento extraordinario al XXV Aniversario de los “Premios Príncipe de Asturias” y de permitirme con este motivo dirigirme a sus lectores.»
Quizás no pensó el Príncipe que el resto de la prensa española le hubiera ofrecido del mismo buen grado sus páginas.
La Casa Real siempre se ha comunicado con los ciudadanos a través de algún medio oficial del Estado. Generalmente la Agencia EFE, que difunde la información al resto de medios para que ninguno resulte favorecido por ellos. Sin embargo no fue así en esta ocasión.
¿Por qué? En algunos círculos periodísticos se echa la culpa a la Princesa Letizia y las amistades que conserva de su etapa como periodista, muchas de ellas del Grupo Prisa, al que pertenece El País Semanal, que publicó la exclusiva.
La exclusiva ha dado que hablar durante todo el fin de semana. Empezó el sábado en el programa de Telecinco Dolce Vita, que adelantaba la exclusiva mostrando ya el ejemplar del dominical que al día siguiente estaría en los quioscos. Habló en aquel programa, cómo no, Jaime Peñafiel, y se dijeron cosas como que el rey Juan Carlos no debía estar al corriente de la exclusiva, que las fotografías de Gorka Lejarcegi para El País Semanal no se hicieron en la casa en la que vive el Príncipe, donde se pretendían hacer, sino directamente en Zarzuela. Y un detalle del más puro estilo «prensa rosa»: se comentó que Letizia advirtió al fotógrafo no ser muy fotogénica, por lo que la sesión se demoró un poco.
Pero el debate más enconado giró en torno a los motivos que pudieron llevar a los Príncipes a conceder una exclusiva a un medio determinado, y la errado o no de esta decisión.
Recoge 20 Minutos otras reacciones de la prensa, como la de la colaboradora del programa Dolde Vita Paloma García-Pelayo aseguró que había hablado con responsables algunos periódicos como ABC y La Razón, y que la exclusiva había sentado muy mal en el seno de los medios más importantes del país.
Una pataleta, no obstante, que ningún editorialista se ha atrevido a hacer pública en las páginas de ningún periódico. Que los enfados con la Casa Real hay que tragárselos y pasar página, o como mucho quejarse sólo en privado.
Quien sí dejó sentir su malestar fue, en la edición impresa del diario El Mundo, que el domingo dedicó gran parte de su suplemento dominical Crónica a la Familia Real, Miguel Ángel Mellado critica la exclusiva de los Príncipes:
«La Casa Real sabrá por qué ha roto un pacto no escrito concediendo un edulcorado posado exclusivo a Prisa, en unas instalaciones que se pagan con el dinero de todos; ¿será que en la Casa la que manda es ella?» (refiriéndose a Letizia Ortiz), escribe.
El único que defendió la actitud de los Príncipes de Asturias fue el consagrado periodista Luis María Ansón, quien, en una intervención telefónica, restó importancia a lo publicado por el dominical y acusó a los presentes en el programa de intentar desprestigiar la imagen del Príncipe.
Ansón dijo que, entre los medios, las exclusivas son normales:
«unas veces se apuntan unos el tanto y otras veces los hacen otros».
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