¿Por qué rectifica El País sobre la intención de Zapatero?

¿Por qué rectifica El País sobre la intención de Zapatero?

Elena de Regoyos (Periodista Digital).- A juzgar por las fuentes tan fidedignas de los periodistas de El País, principalmente ahora que gobierna el PSOE, algo deben de saber para rectificar el titular de portada sobre las intenciones del presidente Zapatero con el mal llamado proceso de paz con ETA.


En la primera edición del diario el titular era rotundo, afirmando que Zapatero mantendrá el proceso de paz pese al robo de 300 pistolas de los etarras en Francia. Sin embargo, ese titular cambió en la segunda edición, quedando tal y como ahora puede verse:

El Gobierno medita si suspende el proceso de paz tras el robo de ETA

Ya incluye un dubitativo «medita». ¿Será que algo les han dicho desde Moncloa? En la nota interna (€), sin embargo, el titular se mantiene en la afirmación inicial:

El Gobierno mantendrá el proceso para el fin del terrorismo si ETA respeta las reglas

Teniendo en cuenta la cantidad de redactores que firman la noticia –Walter Oppenheimer, Genoveva Gastaminza, Luis R. Aizpeolea, José Manuel Romero y Jorge A. Rodríguez-, todos ellos de los de «altos vuelos», con contactos y experiencia, es preciso leer la información entre líneas y con atención, porque seguramente contengas más claves de las que a primera vista aparente.

Y muchos dan por hecho que cuando Aizpeolea, por ejemplo, cita «fuentes de Moncloa», se refiere directamente al mismo presidente Zapatero. Así que no se pierdan una línea, que puede haber más chica de la que cree.

UN EDITORIAL «CAÑERO»

Además, y como algo que viene siendo ya una curiosa constante de El País, en páginas editoriales (€)se critica a un Gobierno que da la impresión de hacer las cosas sobre la marcha y sin plabificar. Otrora a cuenta de la alcaldía de Madrid, ahora por la aparente indecisión sobre la actitud a tomar frente a un proceso de paz boicoteado día sí día también por la propia ETA:

Hay que concretar

El robo de pistolas por un comando de ETA es un hecho «grave» que «tendrá consecuencias». Lo ha dicho Zapatero y es una obviedad. Lo que sería inexplicable es que no las tuviera. Pero el jefe del Gobierno debe concretar en qué se va a traducir su enigmática respuesta.

(…) Pero no conviene pedirle un acto de fe permanente. Ha habido demasiadas señales de que el proceso está en un momento difícil (…) como para que se haga indispensable que Zapatero dé señales sobre su hoja de ruta. De lo contrario, la opinión pública acabará creyendo que no la tiene y que hay mucho de improvisación.

(…) Lo que está claro es que la situación ha empeorado desde aquel momento. Una reunión oficial parece complicada después del robo de pistolas. Resulta necesario exigir a ETA una renovación pública de su compromiso de fin de la violencia para que se pueda entrar en una negociación en toda regla.

En fin, hay que extremar la prudencia. De nada sirve emitir señales a las que después ETA-Batasuna no responde.

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