(Agencias / PD).- Rusia esta luchando contra una creciente insurgencia en la empobrecida y principalmente musulmana región de Ingushetia, donde los periodistas dicen ser golpeados frecuentemente por los servicios de seguridad locales.
La policía antimotines efectuó disparos al aire y golpeó a quienes protestaban el sábado en la capital local de Ingushetia, Nazran, y las oficinas de un periódico gubernamental local fueron incendiadas.
Los dos periodistas, Mustafa Kirkiyev, cronista del perisdico moscovita ‘Zhizn’ y el fotógrafo independiente Said-Khussein Tsarnayev, fueron detenidos por la policía cuando se acercaban a las oficinas del periódico en llamas.
«Fui detenido afuera,» dijo Kirkiyev por teléfono desde la estación de la policía donde fue llevado. «Los policías nos sacaron del automóvil y comenzaron a golpearnos, había unas diez a 12 personas,» dijo, y agregó que estaba tan golpeado que posteriormente llamaron al servicio médico para que acudiera a la celda donde estaba detenido.
Los periodistas tuvieron una breve audiencia en la corte donde fueron multados por alterar el orden público, pero la policía se negó a liberarlos como había indicado el juez. La policía y el ministerio del Interior declinaron realizar comentarios.
