(Agencias / PD).- Los trabajadores del rotativo ‘Le Monde’ han comenzado una huelga sin precedentes para protestar por el plan para suprimir 130 empleos que, según la dirección, pretende equilibrar las cuentas del periódico de referencia de la prensa francesa.
Según el diario, es la primera huelga desde 1976 y la única de la historia del periódico por motivos internos. En 1951 y 1984, se convocaron dos, pero no llegaron a concretarse.
El vespertino francés no estará hoy en los kioscos por segunda vez en su historia a causa de una huelga en protesta por el plan de reestructuración. En 1976, la otra fecha en la que no salió el rotativo, fue en protesta por la situación de sus colegas de ‘France Soir’. Sin embargo, por primera vez los motivos internos del diario son la causa de su ausencia en los kioscos.
El periódico no se publicará este lunes, lo que significa que no estará disponible en París y en las grandes ciudades esta tarde y el martes en las regiones. Su sitio web tampoco será actualizado.
Una asamblea general de la plantilla de empleados está prevista durante la mañana, así como una reunión del personal del grupo frente a la sede del diario.
El origen de la huelga se remonta al plan presentado el 4 de abril por el directorio del grupo, que prevé la supresión de 85 empleos de periodistas y de 45 administrativos.
«Pensamos en la huelga de 24 horas como la única respuesta contra el extremado plan de choque al que nos enfrentamos», opina el representante sindical de la plantilla, Christiane Chombeoau.
Chombeau cree que los recortes propuestos también rompen con la tradición de ‘Le Monde’ de «no aplicar despidos obligatorios».
La empresa editora La Vie-Le Monde también venderá varios activos, incluida la prestigiosa revista de cine ‘Les Cashiers du Cinema’, un ‘magazine’ mensual sobre danza, una cadena de librerías de literatura religiosa y una editorial.
Los periodistas de ‘Le Monde’ esperan que la huelga «frene los despidos obligatorios y lleve a la dirección a dialogar», según ha expuesto Chombeau.
La dirección de ‘Le Monde’ insiste en que la reducción de puestos de trabajo es necesaria. «Son imperativas», ha asegurado el asistente a la dirección editorial, Laurent Greilsamer. El diario tiene entre otros accionistas al español Prisa, editor de ‘El País’, y el francés Lagardère.
