(PD).- El periodista Tim Russert, a quien la revista Time nombró este año una de las 100 personalidades más influyentes del mundo ha fallecido este viernes de un ataque al corazón a los 58 años, cuando volvía a su trabajo en la cadena NBC después de sus vacaciones en Italia.
Russert era el director y moderador del programa Meet the Press y analista político de los programas Nightly News y Today, de la NBC. Además, el periodista, que sufría diabetes, era el entrevistador en un programa semanal llamado The Tim Russert Show.
La repentina muerte del veterano periodista ha conmocionado al mundo político y periodístico de Estados Unidos. El presidente estadounidense, George W. Bush, ha emitido un comunicado tras conocer la noticia, en la que afirma que Russert «como el presentador más antiguo del programa que más tiempo lleva en emisión en la historia de la televisión, ha sido una institución en el ámbito periodístico como en el político en las últimas dos décadas».
John McCain, candidato republicano a la Casa Blanca, se ha manifestado dolido por el fallecimiento de Russert, a quien consideraba «un ejemplo de buen periodista en esta época». Por su parte, Barack Obama, rival de McCain en las próximas elecciones presidenciales de noviembre ha declarado que «Nno había mejor entrevistador que él en la televisión».
Especialista en pronósticos
Tim Russert nació en Nueva York en 1950 y fue asesor de varios políticos demócratas del estado, entre ellos el ex gobernador Mario Cuomo. En 1984 comenzó a trabajar en la oficina de NBC y cuatro años después se convirtió en su director. Según sus colegas, Russert era famoso por sus pronósticos políticos y en 2000 anunció con precisión cuál sería la estructura del Colegio Electoral que designa en última instancia al presidente de Estados Unidos.
Cuatro años después también anunció acertadamente que en la lucha por la presidencia entre el republicano George W. Bush y el demócrata John Kerry, la balanza se inclinaría a favor de uno u otro candidato por los resultados en el estado de Ohio. Hace un año debió comparecer ante las autoridades judiciales por el escándalo planteado por la revelación de la identidad de la agente de la CIA, Valerie Plame.
El veterano periodista estaba casado con Maureen Orth, una corresponsal especial de la revista Vanity Fair desde 1983. Además de su viuda le sobrevive su hijo, Luke.
