La crisis de la prensa no da tregua al grupo líder de comunicación en España. En estos momentos, la compañía creada por el fallecido Jesús Polanco vale en Bolsa 414 millones de euros, una cifra realmente baja si se compara con lo que, por ejemplo, el empresario siderúrgico Alfonso Gallardo estuvo dispuesto a pagar por un 80% del Grupo Zeta en junio de 2008.
Finalmente, esta compra no se llevó a cabo el pasado año, precisamente porque fueron responsables de Prisa los que asesoraron al cacereño Gallardo para que no realizara la operación ya que las cuentas no terminaban de encajarle.
Pero la cifra de los 400 millones de euros resulta si cabe más destacable teniendo en cuenta que Prisa supera con mucho el número de publicaciones impresas que tiene el Grupo Zeta, y además, la compañía fundada por Antonio Asensio no tiene otros medios de comunicación de radio y televisión como si tiene el grupo Prisa. De hecho, tras el cierre de la cadena de emisoras locales Localia, Prisa se estaría planteando seriamente deshacerse de su editorial Santillana e incluso de la Cadena Ser, para poder hacer frente a sus deudas, según aseguran fuentes del sector, informa el diario Negocio.
Las acciones de Prisa sufrieron un espectacular desplome a lo largo del ejercicio 2008, en concreto un 82,39%. Esta caída se debe, entre otros factores, al desembolso extra que tuvo que realizar por el hecho de que Telefónica decidiera acudir a la opa que Prisa lanzó sobre
su filial Sogecable, a la que terminó excluyendo de cotización. El grupo cuenta con una deuda consolidada de 4.800 millones de euros. El objetivo de esta empresa será el de reducir su deuda a tres veces el resultado bruto de explotación (Ebitda) de la compañía, casi la mitad de la actual.
La crisis del pastel publicitario también ha pegado duro a Prisa. Las ventas por publicidad en el periódico El País bajarán en 2008 en torno al 16% y la rentabilidad de este periódico caerá un 40%.
Los problemas crediticios ahogan especialmente a Prisa en España por su absorción de Sogecable, su división de televisión, que ha disparado su deuda. La guerra del fútbol lanzada por Jaume Roures, propietario de Mediapro y el diario Público, ha obligado al grupo presidido por Ignacio Polanco a poner Digital Plus en venta. Según publicaba Juan Varela en su blog, Cebrián cree de la decena de ofertas recibidas se quedarán con cuatro o cinco con las que conseguirán un precio cercano a los 3.850 millones, una valoración muy superior a la que hacen los analistas.
La crisis de la prensa se extiende también hacia Estados Unidos, donde casi todos los grupos de medios han perdido valor hasta provocar la aparición de nuevos propietarios o accionistas, como Rupert Murdoch y su compra de The Wall Street Journal o las continuas presiones sobre The New York Times que hace poco permitían al magnate mexicano Carlos Slim hacerse con un 6,4% de sus acciones.
Precisamente Slim, dueño de la telefónica Telmex y amigo de Felipe González, suena insistentemente como uno de los posibles nuevos accionistas de Prisa.