(PD).- Al menos 12 personas han sido detenidas por su implicación en el gran incendio de un rascacielos de Pekín que forma parte del nuevo complejo de la Televisión Central de China. Entre los 12 arrestados se encuentra un miembro de la televisión estatal, a cuyo cargo estaba la construcción de las instalaciones de la cadena.
El incendio se produjo el pasado lunes durante la celebración del Festival de la Linterna, que festeja la primera luna llena del año chino, y en la que se encienden gran cantidad de fuegos artificiales; una costumbre que deja año tras año un gran número de incendios y de víctimas mortales.
Al día siguiente de que se produjera el incendio, la CCTV tuvo que pedir disculpas. En un comunicado publicado en la su página web, la CCTV aseguró «sentirse triste por la gran pérdida que el incendio ha causado en el patrimonio nacional», además de pedir «disculpas por el tráfico y los inconvenientes que han podido tener los residentes de los alrededores».
Las autoridades municipales de control de incendios aseguraron que «personal de CCTV responsable de la construcción del nuevo complejo televisivo contrató personas para lanzar grandes artefactos pirotécnicos fuera del edificio, causando el incendio».
