Arrasa en Instagram, y no es para menos.
Es cura, sueco, tiene 35 años y está revolucionando las redes con su afición al «crossfit».
Se llama Oskar Arngården y muestra en su cuenta de Instagram el intenso entrenamiento que realiza para conseguir la buena forma física que presenta.
El pastor luterano, que ya cuenta con más de 66.400 seguidores en la red social, se ha convertido en un verdadero «influencer» gracias a las sesiones deportivas y sermones religiosos que comparte en sus publicaciones.
En su perfil de la red social, se define como:
«Pastor en la Iglesia sueca con una gran pasión por el entrenamiento».
Rubio, con ojos azules, sonrisa profident y un cuerpo de escándalo al que destina horas y mucho esfuerzo en el gimnasio. Así es el sueco que cumple al cien por cien con el prototipo que nos imaginamos de hombre nórdico. Lo extraño es que no se haya convertido en un fenómeno viral hasta ahora.
Compagina a la perfección su pasión por el CrossFit con su devoción por la rama luterana del cristianismo.
Los seguidores de este atractivo evangelista se han disparado en las últimas horas, llegando, ya casi, a los 70.000 followers.
Las opiniones están divididas entre quienes piensan que unir ambas aficiones no es lo correcto, y quienes dicen estar encantados de contemplar su imagen cautivadora.
Por eso, en Periodista Digital, hemos salido a la calle para comprobar la opinión que tienen las mujeres de a pie de este portento de sacerdote.