Es para miccionar y no echar gota. En RTVE no se cortan un pelo a la hora de demostrar que la pluralidad de la que hacen gala se acaba desde el mismo momento en el que La Moncloa levanta un teléfono y confecciona una campaña electoral al gusto del inquilino, es decir de Pedro Sánchez.
La última cacicada del ente de Rosa María Mateo tiene nombres y apellidos: es el propio Gobierno quien ha exigido a RTVE que no haya un cara a cara entre Pedro Sánchez y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera.
Lo contó en la noche del 19 de septiembre de 2019 el diputado Juan Carlos Girauta, de Ciudadanos, en el programa ‘En casa de Herrero’ (esRadio)
Ese uso caciquil del ente público donde Sánchez tendría un cara a cara con el segundo y el cuarto, pero no con el tercero, nos pareció exagerado, incluso para Sánchez, incluso para Rosa María Mateo. Esta cacicada de este calibre es rigurosamente cierta y ahora sabemos indubitadamente que quería una repetición electoral.
Girauta añadió que fue Enric Hernández, director de Información y Actualidad de RTVE, quien les dijo que para cambiar esa orden de que se incluyese un cara a cara entre Rivera y Sánchez había que llamar a La Moncloa
Textualmente nos dijeron que lo traéis empaquetadito y aquí lo haremos, fue Enric Hernández quien nos comunicó esta cacicada de tal calibre y que es totalmente cierta.
EL VETO A VOX
Estas tácticas sectarias no son nuevas y en los debates del 28-A en RTVE se vetó al partido de Santiago Abascal con el argumento absurdo de que el partido verde no tenía representación en el Congreso de los Diputados, criterio que no se tuvo en cuenta en 2015 cuando concurrían por primera vez Podemos y Ciudadanos y en cambio sí tuvieron atril en el plató de una TVE que ha optado con Pedro Sánchez por el sectarismo y el servilismo.