Nuevo escándalo que cae sobre Podemos. El último, la denuncia de una ex escolta de Pablo Iglesias a su mujer, Irene Montero, por trato laboral «discriminatorio». Según adelantaba OkDiario, la trabajadora hacía «de recadera para ella y sus hijos, llevaba y traía a amigos y familiares hasta el casoplón de Galapagar y se encargaba del mantenimiento de la vivienda y la mecánica de los vehículos particulares de la pareja».
La escolta estuvo casi dos años trabajando para Irene Montero, y denuncia que la de Podemos le encargaba «hacer compras personales, hacer de chófer o tareas de mantenimiento de vehículos personales». Esto ha quedado reflejado en la demanda que la trabajadora ha interpuesto por despido nulo ante el Juzgado de lo Social número 3 de Madrid en la que pide la readmisión a su puesto de trabajo.
Carlos Cuesta, director adjunto de OkDiario, ha estallado contra la prepotencia que practica esta pareja:
La exclusiva es muy reveladora, una más sobre qué es lo que ocurre con una serie de personas que son muy revolucionarios, tan revolucionarios que en el momento en el que tienen un escolta, hay que recordar que un escolta tiene su función. Entiendo que haya gente que se siente muy prepotente y considera que puede insultar a determinadas personas, considera que en estos ascensos sociales conseguidos gracias a que eres «la persona de», «la mujer de». Si ellos fueron los que «mataron» a Ana Botella por ser la alcaldesa de Madrid porque resultaba que era la mujer de José María Aznar pueden machacar a Ana Botella, nosotros podemos decir que ella ha sido aupada simple y llanamente por ser la pareja de Pablo Iglesias.
El periodista asegura que:
Esta gente que se siente tan prepotente que utiliza a determinados escoltas para que les calienten el coche, les lleven la comida... No es la función de un escolta. Estas personas que luego se sienten orgullos, que se sienten «totalmente emocionados» cuando a un policía se le agrede y se le da de patadas en la cabeza, no sé qué les pasa con la gente que nos protege a todos, en concreto con los que les protegen a ellos mismos.
Y concluye:
Si quieren obtener algo, si quieren obtener esclavos, que se den cuenta que están fuera de onda. Ya fue nauseabunda la utilización de la esclavitud cuando se utilizaba como una practica generalizada hace siglos. Rescatarla ahora, en pleno siglo XXI y en estado de derecho, suena kafkiano. ¿Quiere usted servicio doméstico? Pues págueselo. Si tienes dinero para pagarte ese casoplón, digo yo que tendrás para pagarte un servicio doméstico. Utilizan la prerrogativa, utilizan todo el poder político que tienen única y exclusivamente para vivir de maravilla. Hombre podrían acordarse de esas consignas que lanzan a todo el mundo cuando hablan de los malditos ricos, a lo mejor resulta que los malditos ricos de la casta son ellos.
